Economía

Guerra en el Banco de España: peritos acusan a la cúpula de ocultar información del ‘Caso Bankia’

El carpetazo que ha dado el juez Fernando Andreu a la responsabilidad de la cúpula del Banco de España por la irregular salida a Bolsa de Bankia no ha calmado las aguas en el seno del organismo regulador. Los peritos del organismo supervisor Antonio Busquets y Victor Sánchez acusan a los máximos responsables de la institución de ocultar información al magistrado y consideran que esta es la causa por la que el juez de la Audiencia Nacional ha decidido levantar la imputación del ex gobernador Miguel Ángel Fernández Ordóñez y del resto de la cúpula supervisora del Banco de España.

Ambos peritos indican que el organismo supervisor no ha entregado al magistrado los correos electrónicos intercambiados por los técnicos durante el verano de 2011 (en concreto aquellos que fueron enviados entre julio y septiembre). A juicio de Busquets y Sánchez esto supone una ocultación de “información sensible” que debería haber analizado el juez Andreu, ya que se trata del periodo temporal  que coincide con la salida a Bolsa de Bankia, tal como ha avanzado Vozpopuli.

En sendos documentos elaborados por los citados peritos se defiende la labor del inspector del Banco de España, José Antonio Casaus, cuyo trabajo ha sido clave para avanzar en la investigación del denominado Caso Bankia. De hecho, tanto el magistrado como la Fiscalía rechazaron la imputación de Fernández Ordóñez y de su número dos, Fernando Restoy, hasta que la Sala Tercera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional tomó cartas en el asunto tras analizar la documentación aportada por Casaus.

La Sala Tercera de lo Penal valoró la prueba testifical y los correos electrónicos intercambiados por Casaus con sus superiores en los que advertía de la irregularidad que supondría aprobar la salida a Bolsa de Bankia y apuntaba que acudir al mercado era una “huida hacia delante” que tarde o temprano terminaría en un rescate de la entidad con fondos públicos, como finalmente sucedió.

En su declaración como imputado, Fernández Ordóñez aseguró que nunca vio los informes del inspector Casaus. El ex gobernador siguió el guión marcado por el ex jefe de inspectores del organismo, Pedro Comín, que eximió ante el magistrado al ex gobernador indicando que los citados informes sólo se pusieron en conocimiento de su superior, Pedro González, y del director general de Supervisión, Jerónimo Martínez Tello.

Ahora, tras la decisión del juez Andreu de absolverles, se abre un periodo incierto en el seno del Banco de España, ya que la Sala Tercera de lo Penal de la Audiencia Nacional puede volver a enmendar la plana al magistrado, que desde el primer momento no quiso sentar a Fernández Ordóñez y al resto de altos cargos del organismo supervisor en el banquillo.

OKDIARIO avanzó el pasado febrero que la Fiscalía tampoco iba a variar su criterio tras la imputación de la plana mayor del Banco de España. El Ministerio Público sigue considerando que “no hay indicios de delito penal” en la actuación de Fernández Ordóñez y que, por lo tanto, no debe responder ante la Justicia por su papel en la operación diseñada por la entidad financiera para captar capital en el mercado y evitar la quiebra.

La postura mantenida por la Fiscalía y el instructor de la Audiencia Nacional es que en la salida a Bolsa de Bankia el  ex gobernador del Banco de España se pudo haber equivocado y tener algún tipo de responsabilidad, pero en ningún momento haber cometido un delito. Fuentes del Ministerio Público explicaron que la imputación de Fernández Ordóñez “obligaría a entrar en otras dimensiones procesales, que podrían afectar a otros estamentos”.

La absolución del ex gobernador es un elemento que celebran los dos principales partidos políticos españoles. En el PP (y por extensión en el Gobierno) se temía que una condena pudiera minar la credibilidad del sistema financiero español en un momento especialmente delicado, ya que el sector se enfrenta a un proceso de concentración que debe ser vigilado y tutelado por el Banco de España.

En cuanto al PSOE, la mayor preocupación era que la condena de Fernández Ordóñez sembrara aún más dudas sobre la gestión que hizo el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero de la crisis financiera. El ex gobernador tenía carnet del partido y fue secretario de Estado de Hacienda a las órdenes de Pedro Solbes, hasta que en 2006 se incorporó al Banco de España.

Al margen del Caso Bankia que se instruye en la Audiencia Nacional, una comisión del Congreso de los Diputados impulsada por Podemos y Ciudadanos investigará las responsabilidades políticas de la salida a Bolsa de Bankia en particular y de la gestión de la crisis financiera en general.

Fuentes parlamentarias admiten que PP y PSOE mantienen contactos para alcanzar un “pacto de no agresión” con un doble objetivo: no perjudicar la credibilidad del sistema financiero español y salvar a Zapatero y Fernández Ordóñez de su responsabilidad en la salida a Bolsa de Bankia. Para ello los dos principales partidos intentarán que las intervenciones se centren en la gestión de la crisis (de forma genérica) y se pondrá el foco en la última vicepresidenta económica del Gobierno del PSOE: Elena Salgado.