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Guardar el dinero debajo del colchón: el Banco de España emite un comunicado y puede que te guste

dinero bajo colchón
Lo que aconseja el Banco de España sobre guardar dinero en casa
Blanca Espada

En una era que parece estar cada vez más dominada por la banca digital,  donde las transacciones electrónicas y el pago con tarjeta o con el smartphone está a la orden del día, aún persiste una cierta nostalgia por el efectivo, una sensación de seguridad que puede además ser recomendable en caso de emergencias. Por ello, son muchas las personas que siempre «guardan dinero debajo del colchón», algo que desde el Banco de España han abordado, con una serie de directrices esclarecedoras.

El dinero que puedes tener debajo del colchón

Desde el blog oficial del Banco de España ofrecen consejos valiosos que podrían cambiar la percepción común sobre guardar dinero debajo del colchón. La recomendación principal que emana de esta guía es que, si bien es válido mantener efectivo para eventualidades, «que permita cubrir gastos en función de los objetivos y las necesidades de cada persona o familia de entre seis y doce meses de gastos fijos mensuales». Es decir, que aconsejan ahorrar pero antes, realizar una evaluación personalizada de las obligaciones económicas, abarcando desde los costos de vivienda y alimentación hasta el transporte y otros gastos recurrentes.

Por otro lado, y aunque el Banco de España establece que no existe un límite legal para almacenar dinero en casa, subraya un punto crucial: la procedencia lícita y la previa declaración a Hacienda son requisitos esenciales para cualquier cantidad guardada. La legalidad debe permanecer como pilar fundamental en esta práctica.

El gran inconveniente de guardar dinero en casa

A pesar de que el Banco de España no ve nada ilegal en que guardemos dinero en casa, la la entidad financiera oficial señala también un aspecto significativo con respecto a ese dinero que guardamos bajo el colchón, y es sufre la erosión del valor debido al Índice de Precios al Consumidor (IPC). A medida que los precios se elevan, el poder adquisitivo del dinero físico disminuye, erosionando la capacidad para enfrentar las cambiantes dinámicas económicas.

En su blog, el Banco de España indica que uso de billetes y monedas sigue siendo una alternativa relevante, es decir, una «opción para todos» y en especial para aquellos sin acceso a servicios bancarios, pero hace hincapié en dos razones para que nos lo pensemos dos veces antes de acabar guardando dinero en casa. En primer lugar, destaca la oportunidad perdida de obtener rendimientos al dejar el dinero inactivo. Al invertirlo, podrían surgir nuevas oportunidades de crecimiento financiero, un aspecto que suele pasarse por alto.

La segunda razón, y quizás la más importante, reside en la seguridad. Al mantener grandes sumas de dinero en casa, se aumenta el riesgo de pérdida o robo sin garantía de reembolso. A diferencia de las instituciones financieras, que ofrecen protecciones y seguros, el hogar carece de mecanismos adecuados para salvaguardar estos activos.

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