Economía
Sector turístico

Las grandes hoteleras aumentan sus precios un 18%: «La alta demanda permite que las tarifas suban»

  • Nayara Mateo
  • Redactora de economía, especializada en el sector inmobiliario, turismo, consumo y distribución. Antes en Expansión, Efe y Brainsre.news.

Las grandes hoteleras suben sus precios entre un 10% y un 18% como consecuencia del alza de los costes, especialmente de la energía. Sin embargo, compañías como Meliá y RIU coinciden en que las buenas perspectivas de reservas para este verano y la alta demanda permiten que las tarifas sean más altas.

En concreto, Meliá reconoce: «Hemos registrado un incremento medio de las tarifas del 18% a nivel global, respecto a las tarifas en las mismas fechas del año 2019, que eran mas altas que el pasado verano, afectado todavía por el Covid», explica la firma a OKDIARIO.

Por su parte, RIU explica que las tarifas medias están subiendo en todos los mercados, tanto nacionales como internacionales. «Dependiendo de los hoteles, podemos cifrar la subida entre un 5 y un 10%. Pero la verdad es que los costes están aumentando a un ritmo mucho mayor».

Desde la cadena Marriott comentan que las tarifas de sus hoteles se han incrementado entre un 10 y un 15%. En este sentido, matizan que los aumentos más importantes se han dado en la zona de la costa y en las islas.

NH Hoteles dice que, a diferencia de otras industrias, el precio de los hoteles se va adaptando a la demanda que hay en ese momento y no depende tanto de los costes. De hecho, «las subidas de precio en el sector no están compensando la subida de los costes».

Alta demanda

«La altísima demanda actual permite que las tarifas mejoren; ya que, por ejemplo, muchos clientes prefieren reservar con tiempo y con tarifas pre-pago sus viajes, con el fin de asegurarse sus plazas y prevenir que los precios suban debido a la inflación, en lugar de esperar a las ofertas de última hora», contextualiza Meliá.

En esta misma línea, la cadena mallorquina RIU afirma que debido a la buena demanda, «una pequeña parte del sobrecoste se puede transferir al precio, pero el resto va directamente al margen de beneficio». Además, apunta: «No se puede repercutir todo el aumento de costes al cliente».

En definitiva, las cadenas hoteleras coinciden en que lo que más les está afectando es la subida de los precios energéticos y de los alimentos. A esto, Meliá suma el coste de los materiales de obra. «Antes de la inflación nuestra estrategia de inversión en renovación y mejora del producto, apuesta por los hoteles y habitaciones superiores y de lujo, también estaban impulsando nuestra tarifa media al alza, al pesar más los hoteles de lujo dentro del portfolio total, y ofrecer hoteles más renovados y de más categoría», explica la compañía dirigida por Gabriel Juan Escarrer.