Economía
¡Es el mercado, amigo!

El Gobierno privatiza los controladores aéreos para favorecer a Portobello, su fondo de cabecera

  • Eduardo Segovia
  • Corresponsal de banca y empresas. Doctor y Master en Información Económica. Pasó por El Confidencial y dirigió Bolsamanía. Autor de ‘De los Borbones a los Botines’.

Las infraestructuras vuelven a protagonizar varios escándalos simultáneos por culpa del nepotismo y el tráfico de influencias habituales de este Gobierno. Esta semana por fin han rodado cabezas en Renfe y Transportes por el ridículo mundial de los trenes entre Asturias y Cantabria, pero ya han sido reemplazados por otros igual de incompetentes que habían sido defenestrados previamente. Por otro lado, Pedro Sánchez prepara una privatización histórica de las torres de control de varios aeropuertos para favorecer a su fondo de cabecera, Portobello.

Lo de las torres de control tiene mucha miga. Para empezar, el Gobierno socialcomunista va a privatizar algo. Privatizar, el anatema de los que quieren que sólo existan la sanidad pública, la educación pública, la banca pública, la eléctrica pública, la inmobiliaria pública y hasta el Netflix público. Pero encima, es que Sánchez pretende llegar más lejos que los mismísimos Estados Unidos, el paradigma del neoliberalismo y el capitalismo despiadado, donde no se han atrevido a llegar a tanto.

Vista general del aeropuerto de Palma. EUROPA PRESS

La idea es sacar a subasta las torres de aeropuertos tan importantes para el turismo como Palma de Mallorca, Málaga-Costa del Sol, Gran Canaria, Tenerife Sur, Tenerife Norte, Bilbao o Santiago de Compostela. Algo que los entendidos en la materia consideran un disparate: «Un país como España, potencia turística, no puede permitirse tonterías. El sistema funciona bien y no es caro, mejor no lo toques». Y otras fuentes añaden que «anda que no hay cosas que no funcionan y se deberían privatizar antes que eso».

Portobello ganará

Podemos ha protestado con la boca pequeña, pero acabará tragando, como con todo lo que les cuela Sánchez. Pero la pregunta es por qué el Gobierno tiene tanto interés en esta operación. La respuesta es para favorecer, una vez más, a su fondo de cabecera, Portobello, un ‘fondo buitre’ según Podemos. De hecho, Portobello ya se está preparando para la adjudicación: su empresa Serveo (donde tiene un 75% y Ferrovial el 25%) acaba de comprar el 50% que no poseía en la empresa FerroNATS a NATS, el gestor de navegación aérea equivalente a Enaire en Reino Unido, según informó El Confidencial. Esta empresa, que ha rebautizado como Skyway, será la que puje por las torres españolas.

Por supuesto, habrá otros candidatos (en especial su competidor Saerco), pero las fuentes están convencidas de que Skyway se llevará el gato al agua. Como les hemos contado en OKDIARIO, Portobello, fondo que dirige Íñigo Sánchez Asiaín, y sus empresas participadas son el destino que buscarán varios miembros del equipo económico del Ejecutivo -ministros, secretarios de Estado, directores generales…- si pierden las elecciones.

Los socios de Portobello Capital.

De ahí los continuos favores que el Gobierno le está haciendo -con enormes agravios comparativos-, como los rescates con dinero público de empresas en las que participa como Vivanta (clínicas dentales, agraciada con 40 millones), Mediterránea (catering, 28 millones), Blue Sea (hoteles, 25 millones) y Supera (gimnasios, 15 millones). Compañías que de ninguna manera pueden considerarse estratégicas y que incluso están envueltas en líos judiciales, como Vivanta. Pero a Sánchez nunca le ha importado saltarse sus propias normas en busca de un bien mayor (para él y los suyos).