Economía

Empresas francesas en Cataluña: «No nos planteamos cambiar las sedes, pero queremos estabilidad y seguridad jurídica”

La Cámara de Comercio Francesa de Barcelona, que agrupa a 450 miembros con capital francés implantadas en España y sociedades españolas con presencia en el mercado francés, ha confirmado a OKDIARIO que ninguna de las compañías francesas que forman parte de este club tiene intención de mudarse de Cataluña. “Hasta la fecha, no nos consta” que quieran cambiar su sede social a otro punto del territorio español.

A diferencia de sus homólogos estadounidenses -que están preparando planes de contingencia por si Cataluña se independiza- las empresas galas se quedan, al menos, por el momento. Aunque eso sí, el director de la organización, Philippe Saman asegura que : “a nuestros empresarios hay dos cosas que no les gustan: la inestabilidad y la inseguridad jurídica”.

En relación a su opinión sobre el referéndum ilegal, subrayan que la Cámara “es una entidad apolítica y, como tal, no se posiciona en este debate”.

No conciben la independencia

“Muchos de los grupos que están afincados en Cataluña tienen por campo de actuación el conjunto del mercado español y, en algunos casos, Europa del Sur o el Norte de África. Lo importante para el mundo económico es que Cataluña siga formando parte de la Unión Europea, no me puedo imaginar otro escenario”, apunta Saman.

Desde la Cámara de Comercio Francesa abogan por resolver este conflicto entre el Gobierno central y el autonómico: «todo pasa por sentarse y negociar para encontrar soluciones en las que Cataluña encuentre su sitio. La suerte es que la crisis ha pasado y, con la mejora de la coyuntura, hay margen para poder hacer propuestas. Ofrecer un status quo no será suficiente, nadie quiere continuar con esta situación».

Y si la solución no se encuentra y finalmente los planes de Carles Puigdemont se convierten en realidad -con todo lo que eso conlleva, como por ejemplo la creación de la Agencia Tributaria de Cataluña y el pago de impuestos a la Hacienda catalana-, se plantearían qué hacer llegado el momento.

Aunque hay algo que tienen claro: ellos son empresarios. Y los empresarios, “por definición, respetarán la legislación vigente en su país”, sostiene el director.

Con actividad en Barcelona desde 1883

La Cámara Francesa de Barcelona fue fundada en 1883, lo que la convierte en la agrupación empresarial extranjera más antigua de España. Desde entonces, ha ido ganando adeptos hasta sumar 450 miembros. “Es importante recordar que la presencia de empresas francesas en Cataluña es antigua, numerosa y diversa. La Cámara francesa de Barcelona es un reflejo de ello”.

Esta numerosa presencia las coloca en el primer puesto del podio en cuanto hablamos de facturación. “Somos las segundas en número pero las primeras por facturación. Nuestra presencia es muy diversa, ya que están presentes en casi todos los sectores de la economía española”.

Aunque el clima empresarial en Cataluña esté revuelto, desde la Cámara hacen hincapié el que la coyuntura económica de nuestro país “es muy favorable”.