Economía
CON TRUMP TAMPOCO ESTARÍA TODO PERDIDO

Las constructoras españolas apuestan por Clinton para incrementar su negocio en EEUU

Las elecciones en Estados Unidos están cada vez más cerca y el mundo entero estará pendiente del resultado. España, por supuesto, tampoco será ajena a lo que suceda al otro lado del Atlántico. Con Hillary Clinton y Donald Trump como candidatos, nuestro país será, además, uno de los que más intereses tienen en Estados Unidos.

Para muestra un botón: según los expertos de XTB, Estados Unidos supone, al menos, un 20% de la fuente de generación de ingresos para seis compañías que integran el IBEX 35. Compañías como Grifols, que obtienen más de un 60% de sus beneficios entre Estados Unidos y Canadá siguen de cerca las elecciones, ya que un resultado adverso para sus intereses podría afectar a la regulación del sector. Viscofan, Acerinox o Ferrovial son también algunas de las empresas españolas que más relación tienen con el país norteamericano, pues cerca de un tercio de su cifra de negocios se genera en ese país.

Las constructoras ganarán en Estados Unidos

Lo cierto es que, pase lo que pase, las empresas españolas que viven del ladrillo sacarán un buen pellizco con el resultado electoral y, sobre todo, con la ambición de sendos candidatos de realizar una importante inversión en infraestructuras y, aunque Trump sería más proteccionista con las empresas nacionales, nadie es ajeno a que las constructoras españolas, por desgracia para el candidato republicano, están entre las mejores del mundo. Sin embargo, expertos como Felipe López Gálvez, de SelfBank, señalan a OKDIARIO que “el programa de infraestructuras de Trump es más ambicioso, aunque dada su visión `proteccionista´ probablemente las constructoras extranjeras partirían con desventaja frente a las locales”.

Sede de ACS (Foto: ACS).

En este sentido, el economista Javier Santacruz recuerda que las constructoras españolas tienen bastantes puntos ganados en Estados Unidos “porque las españolas siempre han hecho ofertas más ajustadas que otras grandes compañías”, mientras que apenas hay compañías constructoras “medianamente importantes” en Estados Unidos, donde las compañías de origen español son las que más concursos ganan y las que se llevan las obras más importantes, como la del puente de San Francisco, el aeropuerto de Denver o la remodelación del puerto de Miami.

Con el régimen de concesiones tal y como está planteado en Norteamérica, según explican los expertos, “las únicas o de las pocas que han cumplido los pliegos de condiciones y que están dando un servicio a precios competitivos son precisamente las constructoras españolas, entre las que se encuentran ACS, OHL o Ferrovial”.

Además, compañías de infraestructuras también tendrán su particular ‘agosto’ con el aumento de obra pública norteamericano, ya que en concursos como los de peajes, compañías como Abertis pueden jugar un papel bastante destacado.

Trump no podrá evitar la inmersión de las españolas

Javier Santacruz cree que “las constructoras americanas no tienen mucho que hacer”, ya que “con la experiencia que tienen las españolas, obviamente cualquier oferta la pierden”. Sin embargo, lo cierto es que existe la posibilidad de que Trump opte directamente por excluir a las compañías que no sean estadounidenses de los concursos públicos. Santacruz, por su parte, cree que “una muestra de la inconsistencia de estos razonamientos es que, por ejemplo, uno de los caladeros de votos de Donald Trump es precisamente el gremio de los grandes empresarios, y muchos de ellos están relacionados con el sector exportador, como es el caso del gas o del petróleo”.

El presidente de Ferrovial, Rafael del Pino. (Foto: EFE)

El analista independiente Daniel Galindo, por su parte, también advierte de que “Estados Unidos va a lanzar un importante plan de infraestructuras, algo de lo que se puede beneficiar las empresas españolas, que están muy bien posicionadas”.

ACS, Ferrovial y OHL

Serán las tres constructoras con más papeletas para ganar en las elecciones norteamericanas. “Tienen una posición destacada porque ya son gestoras de grandes obras y que nunca han tenido mala prensa”, explica Santacruz. Precisamente en Estados Unidos, ACS, Ferrovial y OHL ya se disputado varios concursos públicos en importantes ciudades como Nueva York, con lo que el mercado ya está intentando vaticinar quién se llevará cada parte del pastel.

Felipe López Gálvez, por su parte, recuerda además que “OHL, Ferrovial y ACS contemplan en sus respectivos planes estratégicos una apuesta por territorio norteamericano”. Entre las tres, destaca el futuro de Ferrovial, a la que “la compra de Broadspectrum no solo le dará una exposición importante en Australia, si no que facilitará su expansión por EE.UU”.