Economía
Comisión Europea (CE)

Bruselas propone una reserva de 5.000 millones euros frente al impacto económico del Brexit

La Comisión Europea ha propuesto una «Reserva de Ajuste al Brexit», dotada de 5.000 millones de euros, para ayudar a contrarrestar las consecuencias económicas y sociales sobre los sectores más afectados por la salida británica de la Unión Europea (UE) a partir del 1 de enero de 2021.

La reserva ayudará a las empresas y sectores afectados, en particular a la pesca, e incluirá apoyo al empleo y la formación, indicó la CE en un comunicado. También servirá para asistir a las administraciones públicas en el funcionamiento de los controles fronterizos, aduaneros, sanitarios y fitosanitarios y para garantizar servicios esenciales a los ciudadanos y empresas afectados.

La Reserva de Ajuste al Brexit cubrirá los gastos en cualquier Estado miembro durante 30 meses. Se distribuirá en dos rondas: la mayor parte de los 5.000 millones de euros serán prefinanciados en 2021 y las sumas serán calculadas sobre la base del impacto en la economía de cada Estado miembro, teniendo en cuenta el grado de integración económica con el Reino Unido, incluido el comercio de bienes y servicios y las repercusiones sobre el sector pesquero de la UE.

Un tramo más pequeño de ayuda adicional se repartirá en 2024, en caso de que el gasto real supere la asignación inicial otorgada. Para poder recibir reembolsos de la reserva, los Estados miembros deberán demostrar la relación directa de esas peticiones con el Brexit.

El Reglamento propuesto deberá ser adoptado por el Parlamento Europeo y el Consejo (países de la UE). La comisaria de Cohesión y Reformas, Elisa Ferreira, indicó en un comunicado que el final del período de transición el 31 de diciembre de 2020 «tendrá un impacto económico y social importante en las regiones y comunidades locales más vinculadas a la economía y el comercio del Reino Unido».

El comisario de Presupuesto y Administración, Johannes Hahn, dijo que la adaptación estructural a la nueva relación con el Reino Unido «requerirá un ajuste a largo plazo mucho mayor de lo que esta reserva podrá proporcionar» y que el próximo presupuesto de la UE se utilizará en ese sentido.

Aplicación del Brexit

Los Estados miembros de la Unión Europea (UE) se encuentran inmersos en el análisis del acuerdo sobre la relación con el Reino Unido tras el Brexit, con vistas a respaldar su aplicación provisional desde el 1 de enero. Aunque se conocen las líneas generales de ese pacto, del que Bruselas informó el pasado jueves, los elementos concretos no han sido detallados, a la espera de su escrutinio por los estados miembros, que tiene lugar en las distintas capitales y en Bruselas en reuniones de expertos de manera simultánea.

En pleno periodo festivo navideño los trámites se suceden a ritmo acelerado, con vistas a facilitar la aplicación provisional del acuerdo a principios de año. Por primera vez en la historia de la UE, el 25 de diciembre tuvo lugar una reunión de embajadores europeos y en ella se analizó el acuerdo, que establece el marco de la relación futura entre las partes a partir del 1 de enero de 2021, cuando la legislación comunitaria habrá dejado de aplicarse en territorio británico. Está previsto que los embajadores se reúnan de nuevo el 28 de diciembre para volver a abordar el asunto, indicaron fuentes diplomáticas.

La Comisión Europea (CE) propuso el jueves la aplicación provisional del acuerdo entre el 1 de enero y el 28 de febrero de 2021, mientras se completa el proceso de aprobación formal, que entre otras cosas exige la ratificación del texto por el Parlamento Europeo. La prolongación de las negociaciones hasta Nochebuena ha hecho imposible que la Eurocámara le dé el visto bueno antes de fin de año y, finalmente, dará su consentimiento en la sesión plenaria de enero.

Tras el acuerdo del jueves, los embajadores de los países de la UE mantuvieron el día de Navidad una primera reunión en la que el negociador de los Veintisiete, Michel Barnier, les informó sobre el pacto logrado. Antes de dar su visto bueno, los países disponen de unos dos o tres días para examinar los textos de los distintos compromisos, que solo en la parte de comercio y cooperación ocupan 1.246 páginas.

La Comisión debe presentar en los próximos días al Consejo, que reúne a los Estados miembros, la decisión sobre la firma y aplicación provisional del pacto y sobre la conclusión del convenio. El Consejo, por unanimidad, debe apoyar ambas decisiones.