Economía

El BCE quiere tumbar las criptomonedas para mantener su monopolio monetario

La Comisión Europea ha emitido un borrador en el que pide incrementar los controles de identificación de aquellos que canjean criptomonedas por divisas tradicionales por miedo a perder el control sobre la política monetaria. El documento utiliza la financiación terrorista como argumento para desaconsejar su uso, pero los expertos consideran que esta idea está obsoleta y explican que cualquier transacción de ese tipo es perfectamente rastreable, lo que la descarta como vía de financiación.

«La dependencia de actores económicos sobre unidades de moneda virtual, si creciera sustancialmente en el futuro, podría afectar al control de los bancos centrales sobre el suministro de dinero. Por consiguiente, la UE no debería promover un mayor uso de las monedas virtuales», defiende el Banco Central Europeo (BCE) en su propuesta para el Parlamento y el Consejo Europeo.

El economista y director del Instituto Juan de Mariana, Juan Ramón Rallo, cree que ese temor del organismo monetario es lógico porque el BCE «pierde el control de poder robar a la gente, por ejemplo implantando tipos de interés negativos que son impuestos a aquellas personas que guardan su riqueza en líquido. Como eso lo pierde, porque no controlaría esa emisión, pues desde luego le preocupa, pero no es algo que deba preocuparnos a nosotros sino a quienes quieren expoliarnos».

“La posición actual del BCE refleja el interés propio por perpetuar una institución innecesaria y obsoleta, emitiendo un informe simplista que choca con las grandes posibilidades de de esta tecnología (transparencia, inmediatez, reducción de costes, trazabilidad de actividad criminal y habilitación de nuevos modelos de negocio), contrastadas por las propias acciones de principales bancos, empresas de seguros, energía, logística y otros sectores. Esto también ha sido respaldado por informes como el recientemente elaborado por el World Economic Forum, que aglutinando análisis de numeras referencias en diferentes mercados como los anteriormente nombrados dejan lugar a poca duda sobre cuáles son estas posibilidades”, explica Daniel Díez, especialista en Blockchain y tecnología financiera en Everis.

Los expertos aseguran que el enfoque correcto es el de educar a la gente en este tipo de tecnologías y controlar los puntos de entrada y salida de capital, algo que ya se hace. Actualmente no es posible liquidar una gran cuantía de fondos en Bitcoins u otras criptomonedas que tengan procedencia ilícita de forma sencilla y anónima como se quiere hacer creer. Paradójicamente, es justo lo contrario.

«En primer lugar, para liquidar estos fondos es necesario acudir a casas de cambio reguladas como Bitstamp, que cumplen con la normativa vigente en AML/KYC como cualquier banco tradicional», señala Díez. «En segundo lugar», continúa, «las transacciones de este tipo de criptomonedas quedan anotadas en un registro público, auditable por cualquiera, en el cual podemos rastrear todos los movimientos que se han llevado a cabo por una dirección (llamada clave pública).

«Por último», concluye el experto en Blockchain, «es posible conocer la IP real del emisor de la transacción con una precisión del 60%, y a partir de ahí conocer el país y ciudad de origen del pago». Es por tanto más seguro para aquellos que llevan a cabo actividades delictivas el usar dinero efectivo o ciertas commodities, debido a la ausencia de registros que genera el movimiento de los mismos e incluso sistemas como PayPal”.

“Lo interesante del uso de Blockchain es que el BCE podría pasar a ser mero software, un elemento totalmente automatizado que sigue unas reglas fijas y conocidas para todos, sin el entramado burocrático actual. No obstante, como ya podremos imaginar esto no les interesa ya que al final se trata de un lobby más que intenta justificar su existencia mediante el miedo y la confusión”.

Respecto al miedo que trata de instaurar el BCE haciendo referencia la financiación de actividades ilegales, Rallo tiene una opinión similar: «Lo del terrorismo no tiene mucho sentido porque ya se ha financiado hasta hoy sin necesidad de recurrir a ningún tipo de criptomoneda, salvo que además quiera prohibir el metálico».