El vestuario del Real Madrid de baloncesto es un manojo de nervios a día de hoy. Aunque los hechos de las últimas horas no son consecuencias directas del batacazo del pasado domingo en el Gran Canaria Arena, donde los blancos perdieron la final de la Copa del Rey contra Unicaja Málaga, lo cierto es que todos ellos han alterado el bienestar del grupo. Ese que llegó a Las Palmas limpio de mente, pero al que le puede afectar por muchos frentes la situación inestable de la plantilla.
Dennis Smith Jr. ha sido el primero en abandonar el barco. Tras tres veces seguidas siendo descartado en el torneo del KO, el base estadounidense de 27 años ha tirado la toalla en busca de más oportunidades de vuelta a la NBA. Se va con la etiqueta de ser uno de los mayores fracasos de la historia del Real Madrid en su amplio historial de fichajes al haber jugado tan sólo 35 minutos en total.
A Smith Jr. le podría seguir Serge Ibaka, un nombre importante de la plantilla por su dilatada experiencia en la NBA. Este miércoles se ha especulado con la salida del pívot de origen congoleño y es que este tendría un gran enfado al no contar con todo el protagonismo que le gustaría en la rotación de Chus Mateo y, para colmo, la llegada de Bruno Fernando le ha restado aún más minutos.
Además, el jugador considera que sus últimas actuaciones estaban siendo más que notables, siendo una de estas la final de la Copa, en la que aportó con buenas defensas (3 puntos y 4 rebotes en 12:24 minutos). Ante el Gran Canaria no jugó y en cuartos frente al Manresa apenas llegó al cuarto de hora en pista (7:28).
El Real Madrid tiene varios frentes que solucionar
Para colmo, el Real Madrid sondea el fichaje de un polémico jugador de la NBA que se las tuvo con Ibaka para suplir la baja de Smith Jr. Hablamos de Patrick Beverley, un base que se acaba de desvincular del Hapoel Tel Aviv por una fuerte discusión con su entrenador, Dimitris Itoudis. El futurible para el conjunto blanco y uno de sus actuales pívots protagonizaron un famoso altercado sobre la cancha en marzo de 2022.
Ibaka pertenecía a los Bucks, mientras que Beverley se encontraba jugando en los Timberwolves. Todo ocurrió cuando Karl-Anthony Towns lanzó un tiro libre en el primer cuarto y el pívot se enzarzó con Taurean Prince al forcejear por la pelota, cuando apareció el base estadounidense y le dio un empujón al ahora baloncestistas del Real Madrid, que reaccionó totalmente enfurecido generando una pelea mayor con más jugadores.
El caso es que el Real Madrid no gana disgustos y ahora se queda sin un jugador por el que había apostado dándole un contrato y al que esperaba poner en forma con tal de dar una rotación más rica a Facundo Campazzo, que no da abasto en la demarcación de 1 con la escasa fluidez hasta hoy de Andrés Feliz.
Problemas similares hay en los pívots, ya que aunque haya hasta cuatro jugadores que puedan ocupar dicha posición, la realidad es que Chus Mateo ha demostrado que sólo se fía ciegamente de Walter Tavares. Ni de Fernando, ni de Usman Garuba ni de Ibaka. Así, el caboverdiano llegó a la final de Copa totalmente desgastado tras el esfuerzo contra el Gran Canaria. La salida del ex internacional español podría provocar otro agujero en este área trascendental de la cancha.
