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Mundial de Fórmula 1: Gran Premio de Brasil

Verstappen logra la victoria de su vida en Brasil y encarga su cuarto Mundial de Fórmula 1

62 puntos le separan ya de Lando Norris, que acabó sexto pese a tener la pole

Fernando Alonso no puntúo y Carlos Sainz tampoco tras su segundo accidente del día

Así te hemos contado la caótica carrera de Interlagos

Max Verstappen cuajó una de las mejores actuaciones de su vida en la Fórmula 1 para ganar la carrera en el Gran Premio de Brasil y encargar su cuarto título Mundial. El holandés se creció ante todas las adversidades habidas y por haber, anduvo listo al alargar su primera parada, y firmó una remontada increíble que ahogó a Lando Norris en la pelea por el trofeo (62 puntos de diferencia cuando restan tres fechas del calendario). Golpetazo definitivo que le concede la ocasión de ser campeón del mundo en la siguiente cita en Las Vegas después de marcarse la machada de remontar 16 posiciones. Y no ganaba desde España, es decir, diez pruebas consecutivas sin conocer la victoria que para nada han servido a su oponente.

La cruz de este duelo se la llevó precisamente el británico, muy nervioso desde la salida y con salidas de pista inexplicables que le dejaron sexto, en un día lluvioso, pero festivo para Alpine, que metió a sus dos pilotos en el podio de forma totalmente inesperada. Esteban Ocon fue segundo y Pierre Gasly tercero en la carrera más difícil de pronosticar de los últimos años en la F1. George Russell se puso primero en la salida y acabó cuarto, con Charles Leclerc quinto, seguido de los dos pilotos de McLaren (Norris y Oscar Piastri). Yuki Tsunoda, Liam Lawson y Lewis Hamilton, que remontó varias posiciones y resistió a Checo Pérez, cerraron el top 10.

Domingo amargo para los pilotos españoles, con el accidente de Carlos Sainz en el ecuador que le dejaba sin puntos, a lo que se sumó tras otra bandera amarilla una salida de pista que arruinó la prueba de Fernando Alonso, que vivió un día negro y acabó decimocuarto sólo por delante de Guanyu Zhou. Los dos hispanos se accidentaron en la clasificación, en el caso del asturiano buscando la pole, y ambos se quedarían sin nada que llevarse a la boca en una carrera que duró dos horas y media.

No había empezado la carrera y ya teníamos el primer incidente. No era tan grave como los que se vieron en la clasificación, pero Lance Stroll mordía el polvo cuando ni siquiera se había producido la salida. El piloto canadiense de Aston Martin dio un trompo que le hizo estamparse contra uno de los muros del sector cinco del circuito de Interlagos después de que su escudería hiciese todos los esfuerzos posibles para llevar ese coche a pista pocas horas después de su accidente en la Q2.

Emociones fuertes antes de la salida

La salida se abortó por el ridículo abandono de Stroll y el resto de los 18 pilotos –Alex Albon tampoco corrió por su durísimo accidente en la Q3– dieron otra vuelta de formación. Aston Martin se desfondó para lograr sacar sus dos monoplazas a pista, también el de Alonso tras su grave incidente, pero por el lado del canadiense no le valió para nada. Además, sin apenas haber arrancado la prueba, ya se investigaba a Norris, que tenía la pole, por incumplir el procedimiento de salida.

La salida se abortó. Los pilotos se colocaron en su casilla y los mecánicos de pista volvían a entrar en escena mientras la amenaza de lluvia era más y más fuerte. Recordemos que la carrera se adelantó hora y media precisamente por el diluvio (16:30 horas), pero esta prueba también se retrasó por el leve accidente de Stroll, que salió ileso de ese ridículo en la vuelta de formación. No se salió una sino dos veces del trazado el canadiense.

Siete posiciones ganó Verstappen en la primera vuelta, nada más y nada menos, mientras que Norris perdía otro liderato, esta vez ante Russell. El compañero del holandés en Red Bull, Checo, tenía el primer susto de la tarde con una salida de pista a la primera de cambio. El tricampeón del mundo ampliaba su cruzada superando a Gasly y a Alonso para ponerse octavo en la séptima vuelta. Siguiente objetivo: Piastri.

Fue en el décimo giro cuando Verstappen pasó sobradamente al australiano para seguir cabalgando hacia el podio, haciendo del charco de Interlagos su jardín de rosas. Lawson, piloto del filial de Red Bull, se apartó en cuanto vio al holandés por el retrovisor y en apenas 12 vueltas Verstappen ya estaba a una posición del top 5. Su próximo objetivo ya era el Ferrari de Leclerc.

Aluvión de banderas

Los tiempos estaban en un puño y Sainz, tras subir seis puestos, se topó con un férreo Franco Colapinto que venía de adelantar a Hamilton. El adelantamiento al argentino se antojaba decisivo para poder llegar a la zona de puntos, pero una salida de pista le condenó con el de Williams y con el de Mercedes. Mientras, para los intereses de Ferrari, su compañero se defendía de los ataques de Verstappen. Fue precisamente Leclerc el primero en entrar en boxes, renovando su juego de intermedios a la espera de lluvia más fuerte.

En la vuelta 28 entró en escena el coche de seguridad virtual por un hipotético abandono de Nico Hülkenberg y la mayoría de los pilotos desfilaban hacia boxes. El alemán pudo volver a correr y así finalizaba el atisbo de bandera amarilla, aunque luego le acabarían descalificando. Pérez, Tsunoda y Lawson salían de la parada con neumáticos extremos, mientras que el agua caía y caía sobre Interlagos.

Norris navegó entre los surcos de Sao Paulo para pasar a Russell al límite del momento en el que se desplegó el coche de seguridad en la vuelta 30. La situación era la siguiente: Ocon lideraba, con Verstappen en segundo puesto y su compañero Gasly tercero, pero ninguno de los tres había parado llegados casi al ecuador. Colapinto recibía un nuevo estacazo, pero este ya definitivo en la segunda vuelta con bandera amarilla. El accidente fue brutal, destrozó su Williams y obligó a dirección de carrera a detener la prueba.

El más perjudicado era Norris, que no se podía creer cómo Verstappen había llegado a aferrarse a la segunda posición. Para colmo, un error le condenó con Russell en una resalida con movimientos como el adelantamiento de Hamilton a Alonso pese a la defensa numantina del asturiano, y el amago de accidente de Oliver Bearman, que se fue a la cola pese a patinar en un duelo con Sainz.

El accidente de Sainz brinda la oportunidad decisiva a Verstappen

A todo esto, la noticia era que Ocon se estaba escapando de Verstappen y que Alpine tenía un doblete provisional en el podio. El holandés gozó de otro intento y este no lo desaprovechó para adelantar al francés y ponerse en cabeza tras el triste accidente de Sainz que le dejaba sin puntuar una semana después de reinar en México.

El drama para los españoles se acentuaba con una salida de pista de Alonso que le mandaba al final de la cola, que en este caos era ser decimoquinto. Verstappen se paseó en las últimas vueltas, acabando a 18 segundos de Ocon, y ponía la mirada en su cuarto entorchado con un triunfo bestial, digno de los mejores de la historia de este deporte.