Ryan Mason: el joven sustituto de Mou que tuvo que dejar el fútbol tras fracturarse el cráneo

Ryan Mason es el nuevo entrenador del Tottenham Hotspur tras la destitución ayer lunes de José Mourinho como técnico de los Spurs. «Ryan Mason tomará el entrenamiento del primer equipo hoy y se realizará una actualización adicional a su debido tiempo», decía en el comunicado oficial del adiós del entrenador portugués para que, este martes, se anunciara de forma oficial también que Mason entrenará al cuadro londinense hasta el término de la presente temporada. Pero, ¿quién es el nuevo entrenador del Tottenham Hotspur Ryan Mason?

Ryan Mason (1991) es desde hoy el entrenador más joven que dirige a un club de la Premier League en toda su historia. Hasta este pasado fin de semana, el inglés era técnico de los juveniles de los Spurs y hoy ya dirige los entrenamientos del primer equipo. Allí se reencontrará con compañeros con los que no hace mucho compartía vestuario, como el capitán Harry Kane. Y es que Mason tiene una historia de superación, evolución y adaptación que merece ser contada.

El 22 de enero de 2017 cambió la vida de Ryan Mason. Con 25 años y formando parte de las filas del Hull City, club que pagó por él más de 15 millones de euros por su fichaje al Tottenham Hotspur en 2016, protagonizó uno de los choques más brutales que se recuerdan recientemente. En un partido ante el Chelsea en Stamford Bridge, Mason fue a disputar un balón aéreo ante Gary Cahill. El impacto fue cabeza con cabeza y fue el por aquel entonces jugador del Hull City el que se llevó la peor parte de aquel encontronazo: fue el blue el que impactó con su parte frontal a la lateral de la cabeza del jugador visitante.

Mason perdió ipso facto el conocimiento y cayó desplomado en el suelo. Las asistencias médicas fueron rapidísimas y un silencio sepulcral reinó en Stamford Bridge durante varios minutos. El inglés estuvo tendido en el césped durante más de 10 minutos, fue retirado en camilla y necesitó oxígeno hasta que llegó Hospital St. Mary. Allí fue operado de urgencia por una fractura de cráneo por la que estuvo ingresado varios días, aunque estable tras las primeras horas. La intervención dejó una cicatriz que cubrió toda la cabeza del jugador, de la oreja a la frente en un semicírculo.

Los medios británicos dibujaban un escenario delicado, hablando de que su vida pendía de un hilo tras el golpe. Fue Mason tras recuperarse de aquello el que aseguró tal extremo en una dura entrevista en Daily Mail, donde contó con detalles el después del golpe y la intervención, así como la recuperación. Dos frases ilustran aquellas declaraciones: «He vivido una montaña rusa, pero tengo suerte de estar vivo» y «sentí como si una bomba hubiera estallado en mi cabeza».

Tras una semana y un día, Ryan Mason recibió el alta médica. La intervención había dejado en el interior de su cabeza 14 placas de metal alrededor de su cráneo que necesitaron de 28 tornillos y 45 grapas para su sujeción como el propio inglés aseguró en otra entrevista para Four Four Two.

13 meses luchando por volver al fútbol

Ryan Mason se vio obligado a dejar el fútbol 13 meses después de lo sucedido en Stamford Bridge. Tenía solo 26 años cuando daba a conocer la triste noticia. Todo ese tiempo estuvo alejado de los terrenos, sin poder disputar ni entrenar, centrado en su vuelta al fútbol, algo que no pudo lograr pese a su empeño.

«Confirmo que después de haber seguido el consejo de un especialista, debo abandonar mi carrera como futbolista profesional. He trabajado sin descanso para poder volver. Desafortunadamente, no tengo otra opción que retirarme debido a la naturaleza de mi infortunio. Estaré eternamente agradecido a todo el mundo que me ha ayudado con esta lesión que puso mi vida en peligro. Finalmente, representar a mi país fue un honor que nadie puede quitarme y algo de lo que estoy muy orgulloso», decía Mason en un comunicado en el que anunciaba que colgaba las botas.

En ese mismo instante, comenzó una nueva vida para Ryan Mason. El inglés comenzaría a formarse como entrenador y pronto accedería a la escuela del Tottenham Hotspur, donde comenzaría su carrera en los banquillos, ajeno ya a la agresividad que a veces aparece sobre el terreno de juego. Tres años y dos meses después de anunciar su adiós, Mason es nombrado entrenador de los Spurs e inicia su camino en la élite como técnico más joven en la historia de la competición inglesa, relevando así a Attilio Lombardo, que entrenó al Crystal Palace con solo 32 años y dos meses.