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Compareció a su llegada a España

Nadal: «No me obsesiona ser el jugador con más Grand Slams»

  • Nacho Atanes
  • Redactor de deportes y canterano de OKDIARIO. Desde 2016 cubriendo la información de tenis. También baloncesto, fútbol, ciclismo y otros contenidos.

Rafael Nadal, flamante campeón del Open de Australia, su vigesimoprimer Grand Slam, compareció ante los medios de comunicación en una rueda de prensa concedida en su academia en Manacor, a su llegada a España. El tenista español analizó su victoria en Melbourne, así como sus objetivos más próximos en el calendario.

Jugar pocos torneos

«Si juego menos dejo de ser tenista porque menos no puedo jugar. He jugado en ocasiones contadas. Lo que me planteo es jugar más. He jugado seis u ocho torneos al año. Lo que me gustaría es no ser tan selectivo».

Ganar 21 títulos de Grand Slam

«Hace poco firmaba jugar a tenis. Mi discurso no cambia. ¿Quiero ser el que tenga más de los tres? Sí, me encantaría. Pero no me obsesiona la idea de no serlo. No creo que 21 sean suficientes para ser el que más tiene. Voy a pelear por ello y espero tener opciones si mi físico me lo permite. El año pasado ya estuve cerca de los 21 en Roland Garros. Si soy el que más grandes tiene o no no creo que me afecte en mi vida. Pero en mi día a día no voy a entrenar pensando en ganar más que el otro».

Próximos retos

«Cada torneo que viene no lo he ganado. Mi ambición nunca ha sido desmesurada, lo que pasa es que a mí me gusta hacer lo que hago cuando no es un desastre físico. A mí me gusta entrenar y competir. Sé que todo en esta vida tiene una fecha de caducidad y sé que no es para siempre. Mientras tenga la capacidad de poder disfrutar esta es mi ilusión. Ganar o perder es parte de nuestra vida. Competir en los mejores estadios del mundo me motiva, tener a las personas adecuadas a tu lado te cambia la vida».

Sus peores momentos

«Al final somos personas antes que deportistas y pasamos por momentos mejores y otros peores. Cada uno tiene sus objetivos y ambiciones. Hasta hace un mes, con mi día a día aquí, no estaba apto para pelear por mis objetivos. Son cambios y momentos de dudas en la vida, que buscas soluciones y no las encuentras. Son momentos en los que no sabes qué va pasar y lo que hice es seguir. He hecho cambios en mi forma de trabajar, he trabajado bien en el gimnasio, que es algo que no me gusta especialmente…».

Punto de inflexión

«Yo no pensaba en ganar porque no había podido entrenar bien. Gané el primer torneo y es un paso adelante. A partir de ahí hay varios momentos clave: varios entrenamientos contra los mejores y en los que estoy jugando de tú a tú. Y después el tercer partido con Khachanov porque doy un paso adelante de nivel. Fue el primer gran reto y lo superé con buenas sensaciones».

Celebración

«Estamos en una situación de virus complicado y las celebraciones tienen que ser comedidas. Claro que voy a ver a mi familia y amigos».

El sufrimiento y el título

«Hubo momentos duros porque el primer set fue mejor que yo. En el segundo cambia todo, lo que pasa es que me gana el tie break y yo no iba sobrado físicamente. Cuando pierdo el segundo set es un mazazo muy duro. Fue un momento de máxima decepción. Fui remontando y empecé a creer. Cada vez me sentía mejor y más capacitado. Australia es el torneo donde he sufrido más y he tenido muchos momentos críticos a nivel de lesiones. A mi edad conseguir el segundo título allí significa mucho».

Sentir la presión

«La presión siempre depende del momento. A la semifinal y la final sí que notaba la presión. Soy un competidor y veía las opciones de éxito. Antes de empezar la presión era diferente y era la de aguantar física y tenísticamente».

Duda para Acapulco

«Tengo que analizar cómo estoy. Indian Wells seguro que voy y con Acapulco el espacio de tiempo es más corto. Tengo que tomar decisiones acorde a lo que mi cuerpo me permita. He podido competir al máximo contra los mejores. Entrenando me he sentido competitivo con todos».

La pelota de partido

«Estar en la situación que estaba ya era un regalo, pero sí, estaba nervioso antes de la final. Otros años había llegado preparado y este año se ha dado todo al revés, con meses muy malos y sin poder entrenarme bien. Entre Kuwait y Abu Dabi me tuve que quedar 10 días encerrado en casa. La situación a nivel deportivo era dramática. Jugué con desparpajo, con ilusión y con alegría. La suerte hubo momentos que estuvo de mi lado como el golpe de calor con Shapovalov».

Firmas para ‘nombrar’ el Aeropuerto

«Si la gente que tiene que decidir eso cree que es lo adecuado para el aeropuerto pues encantado de la vida y un honor».

La remontada con dos sets abajo

«A posteriori todo siempre queda muy bonito y hermoso cuando las cosas terminan como terminaron. Pero en ese momento pensaba que el tema estaba muy complicado. Lo único que no se puede es decir: ‘ya está’. Pensaba en el siguiente punto y mantenerme en el partido. A la hora de ganar siempre hay ese vértigo y siempre hay una opción. Pasas de estar en una opción crítica a que te cambia el panorama. En el tenis por la forma de contar te da opciones. A mí me había pasado varias veces en este torneo pero al revés».

La bicicleta

«Estaba muy cansado y me fui a la bicicleta. Rod Laver es un personaje histórico en nuestro deporte. Consiguió muchos ‘Grand Slam, pero podía haber logrado más si no se hubiera pasado a profesionales, Me felicitó y quedamos en vernos en Indian Wells».