Deportes
Conflicto en el 'Caso Horarios'

La mentira de Tebas a toda España: los clubes no perderán ni un euro por no jugar los lunes

  • Francisco Rabadán
  • Redactor jefe de deportes. He tenido la oportunidad de cubrir dos Juegos Olímpicos, varios Mundiales de distintas disciplinas y algún que otro All-Star de la NBA con los Gasol. De Córdoba y sin acento.

Javier Tebas reunió recientemente a los clubes de fútbol profesional para hablar del controvertido límite salarial y les lanzó un mensaje de tranquilidad sobre el conflicto que mantiene con la Federación Española de Fútbol en lo referente a jugar viernes y lunes. «No vamos a perder nada, ningún contrato de los que tenemos firmados está en peligro», dijo el mandatario de la patronal de clubes a los allí reunidos.

Después de promulgar por tierra, mar y aire que existía un peligro de perder 2.300 millones de euros en contratos televisivos, Tebas admitió que esa posibilidad había desaparecido tras hablar con los operadores implicados en el asunto. Aunque otras fuentes aclaran sobre el asunto que «a largo plazo puede perder valor de producto porque no estar los lunes quita competitividad a la Liga contra otras competiciones».

El presidente de la Liga, que llegó a amenazar con no jugar durante las tres primeras jornadas de competición, estimó una pérdida de 300 millones por no jugar en lunes tras la resolución del juez Sánchez Magro. Tebas, sin embargo, explicó a los clubes que el hecho de que se pueda seguir jugando en distintas franjas horarias ha sido decisivo para que ningún compromiso adquirido con los operadores televisivos se rompa.

Tebas ha vuelto a quedar retratado en sus intenciones por controlar el fútbol español y derechos que no tiene. Su amenaza fantasma de que había riesgo de meter en la quiebra a los clubes se ha quedado en una cortina de humo mediática ante la que ni el propio juez Sánchez Magro picó.

Ahora, con la sentencia definitiva del ‘Caso Horarios’ pendiente de conocerse, Tebas tendrá que cambiar de estrategia porque ya no puede hacerse la víctima. «Este cambio tendría consecuencias económicas importantísimas y me parece muy frívolo que no se tengan en cuenta; es evidente que el perjuicio es superior al 30%, además del reputacional, que da una imagen poco seria de nuestro país como industria y como deporte», dijo su socio Roures ante el juez. Donde dije digo, digo Diego.