El entrenador del Oporto se pone farruco: «De Ramos tengo una cosa que decir, pero no la digo»

«El hombre que no sabe callar, tampoco sabe hablar». El conocido proverbio del poeta romano Publio Siro es la adaptación de lo que se saca en claro de las últimas declaraciones del entrenador del Oporto, Sergio Conceiçao, respecto al culebrón Casillas.

Muchos son los futbolistas y técnicos que se han manifestado de su nueva suplencia prolongada y más durante el parón de selecciones. Sergio Ramos fue uno de ellos llegando a comparar a su ahora ejecutor con Mourinho, a lo que su compatriota portugués ha respondido: «De él tengo una cosa que decir, pero no la digo».

«No vale la pena entrar en lo que los otros comentan», apostilló Conceiçao desdiciéndose a continuación en la misma rueda de prensa reconociendo que estará «atento» a las informaciones que se viertan sobre su persona en el tema Casillas.

El exportero del Real Madrid fue titular con éste su tercer míster en el país vecino -Lopetegui y Nuno fueron los anteriores- hasta la jornada nueve de la Liga Sagres y la segunda fecha de la Champions League. Con tan sólo seis goles encajados en diez partidos estaba siendo uno de los mejores en su puesto de Europa hasta que llegó el segundo juicio de su carrera.

Lopetegui sí recibió

Otro de los que se han expresado en cuanto a la suplencia de Casillas ha sido precisamente uno de sus antecesores en el banquillo del Oporto, Julen Lopetegui. El ahora seleccionador español dijo en una entrevista reciente que le había «sorprendido» este detalle con su expupilo: «Estaba jugando muy bien».

Conceiçao no se ha cortado esta vez con un entrenador que pusiera una gran parte de la base actual de Los Dragones (Marcano, Brahimi…): «Cuando Iker juegue espero que lo vea y le convoque para la selección». Esta última frase no le habrá sentado muy bien al madridista ya que puede ser interpretada como una mofa hacia su persona.