El Camp Nou está en ruinas: operarios vigilan que no salten los plomos durante los partidos

El Camp Nou está en ruinas: operarios vigilan que no salten los plomos durante los partidos
Javier Iglesias

El Camp Nou está en ruinas y así lo reconoció la vicepresidenta del club Elena Fort en la Asamblea de Socios celebrada este domingo y que no pudo concluirse. Sin embargo sí que hubo tiempo antes de su suspensión de que se explicase que el mal estado del coliseo llega al punto de que «los cuadros de luces están vigilados durante los encuentros por operarios para que no salten los plomos».

Estas sorprendentes declaraciones de la vicepresidenta y portavoz de la Junta Directiva llegaron a la hora de explicar la importancia del proyecto del Espai Barça «sobre el que se va a basar la recuperación económica» del club. Además de la ‘anécdota’ de la vigilancia de los cuadros de la luz, Fort también desveló que «la restauración no puede tener horno porque no hay capacidad».

La directiva blaugrana buscaba pedir luz verde para la obtención de la financiación, un crédito de unos 1.500 millones de euros, para poder llevar a cabo este proyecto de remodelación del Camp Nou, nuevo Palau Blaugrana y campus del club. Sin embargo, la suspensión por culpa de una mala planificación que solapaba la reunión con el partido contra el Valencia hizo que todo quedase en el aire y los presentes no pudiesen votar.

«El Camp Nou tiene 64 años. En verano se arreglaron las patologías más urgentes por un valor de 1,8 millones de euros, para poder volver a abrir al público. Tenemos accesos anticuados con sólo 15 ascensores y ninguna escalera mecánica. Sólo el 28% de los asientos están cubiertos, los accesos de evacuación son poco eficientes, tenemos una tecnología obsoleta», afirmó Fort a la vez que confesar que cada partido de Euroliga pagan una multa por las deficiencias que también muestra el Palau Blaugrana.

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