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El Barça no cierra la Liga

Así hemos vivido el partido de Liga Santander entre Getafe y Barcelona

Así queda la clasificación de la Liga Santander tras el empate del Barcelona contra el Getafe

El Barcelona sigue sin cerrar el título de Liga. El líder volvió a completar un partido muy pobre en Getafe, donde no pasó del empate sin goles igual que le ocurrió en su anterior duelo contra el Girona. La renta de los culés, que encadenan tres partidos sin marcar, se reduce a 11 puntos respecto al Real Madrid. Y a punto estuvo de perder, pero Borja Mayoral mandó fuera una ocasión cristalina en los minutos finales. Un Barça de mínimos, espectral, pero con una ventaja demasiado amplia para inquietarse… de momento.

De nuevo con bajas muy sensibles en la convocatoria (Christensen, De Jong, Pedri y Dembélé) a Xavi le dio por meterse al laboratorio, sacar la probeta y ponerse a jugar con la probeta: Balde de extremo izquierdo y Jordi Alba cubriéndole la espalda. Otro interesante mensajito para Ansu Fati. Al cuarto de hora también cayó Sergi Roberto por una lesión muscular y ocupó su vacante en el lateral derecho… Eric García.

El Barça era un Frankenstein y además, perezoso. El calorcito que caldeaba Getefe invitaba a una siesta bastante larga, casi 25 minutos hasta que se asomó por primera vez a la portería de David Soria. Fue su única ocasión clara en toda la primera parte y fue bastante increíble que no acabara en gol. Porque mira que es difícil darle dos veces al palo en la misma jugada.

Un saque de puerta de Ter Stegen horriblemente defendido por los locales se convirtió en un mano a mano de Rapinha, que disparó al poste. Al balón rechazado llegó Balde, quien con toda la portería a su disposición la mandó exactamente al mismo lugar que el brasileño. Ver para creer. Es lo que tiene poner a un defensa de delantero. Poco que reprocharle al canterano. El culpable real no llevaba camiseta de juego,  sino camisa blanca y estaba en la banda dando instrucciones.

Y eso fue casi todo por parte visitante hasta el descanso. Jordi Alba se hartó a perder balones, Lewandowski se enredó en tropecientas batallas con Alderete y el Getafe mantenía la compostura sin excesivos agobios. Incluso dispuso de un par de buenos cabezazos por parte de Munir y Enes Unal para adelantarse, pero ambos se marcharon fuera por poco. Por lo demás, poco sufrimiento frente a un líder bastante plano. Un día más. Poco cambiaría la historia en la segunda parte.