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Liga de Naciones

Ansu Fati espera recuperar en septiembre

Llega el fin de curso y con él la hora de hacer balances. Hay quién lleva muy bien las materias y sabe que el año que viene tendrá que renovar el pasaporte para irse a Qatar. Otros siguen peleando por aprobar para subirse a ese tren, mientras que hay quien tiene que hacerlo muy bien a partir de agosto para tener una oportunidad que les abra las puertas del Mundial. Luego, está Ansu Fati. Un estudiante excelente, que lo ha pasado realmente mal en los últimos tiempos por culpa de las lesiones y que en condiciones normales estaría en el primer grupo, pero que se ha asegurado una recuperación en septiembre que le permita confirmar su presencia en la cita de 2022.

“Me voy a referir a la contestación que hice cuando le convocamos. No fue titular ni en el partido que jugó el Barça en Australia. Lo llamé como signo de motivación, para que viese qué hacemos con y sin balón. Después de ver su nivel, he confirmado que la lesión forma parte del pasado. Podría jugar de titular, de suplente, no jugar… Pero es positivo porque le he visto mejor. Es un jugador recuperado en mi opinión. Además, es único en su relación con el gol. Fuimos de los primeros en traerlo”, explicó Luis Enrique en rueda de prensa al ser preguntado por Ansu.

La situación con Ansu Fati está clara y el jugador la comparte y comprende perfectamente. La llamada de Luis Enrique en esta convocatoria sólo tenía como objetivo que regresase a la dinámica de grupo y que volviese a empaparse de los aspectos tácticos del combinado nacional. Jugar era un aspecto totalmente secundario. Contra Portugal, República Checa y Suiza no lo hizo, mientras que frente a los checos en La Rosaleda podría tener unos minutos. No obstante, este no era el objetivo principal del asturiano al llamar al joven jugador del Barcelona.

Ansu ha aprovechado estos días de concentración con la selección española para volver a sentirse parte del equipo nacional. El reto de Luis Enrique y del jugador es empezar la temporada con minutos y que en el parón de septiembre ya sí pueda jugar con normalidad. Si lo consigue, se puede esperar grandes cosas del barcelonista en Qatar, donde las esperanzas en su fútbol son máximas.