Alcaraz exhibe solidez para aplacar a Rublev y alcanzar los cuartos de final en Wimbledon
El murciano resiste la racha de buen juego del ruso y acaba imponiendo su estilo y llevándose el partido
Ya aterriza en cuartos de final donde se enfrentará al tenista local, Cameron Norrie

Florece Alcaraz sobre la hierba de Wimbledon, ahora sí tras superar a un rival inflamable. Rublev hinca la rodilla (6-7, 6-3, 6-4, 6-4) y saca la bandera blanca de la rendición tras firmar un partido más que serio, pero insuficiente para cortar el paso de Carlitos, que avanza a cuartos de final sin alardes y fuego artificiales, pero sí con solidez. A falta de encontrar esa versión arrolladora, al murciano le basta con ir subiendo el nivel para superar rondas. De momento nadie puede con el campeón.
Tampoco la vertiginosa y potente derecha de Rublev, que la soltó con gusto cuando se sintió cómodo sobre la pista. Pero está mostrando Alcaraz una versión cada vez más madura y jerárquica. Él decide el cómo y el cuándo y no da puntada sin hilo. Si varía su registro de golpes es porque busca algo determinado, si acelera también, pero todas las decisiones tienen el fin como denominador común: ganar el punto.
En tramos del partido con la derecha, otros con la dejada y en la mayoría con ambos golpes. Imposible para Rublev que buscaba explicaciones con la mirada en el horizonte. Su partido fue medido a la par que sólido, pero estaba abocado a perderlo. Esa es la sensación que transmite el Alcaraz de ahora, al que le da igual lo que le lancen desde el otro lado porque encuentra respuestas a todas las cuestiones. Ya son 22 victorias seguidas y 18 partidos sin perder en Wimbledon.
La derecha de Rublev fue por momentos la que mandó en el encuentro. El español se vio con 1-4 en contra en el primer set, pero reaccionó para mandar la manga al tie break, e incluso tener el parcial en su mano tras situarse 5-3 en la muerte súbita. Sin embargo, el tenista ruso metió una marcha más, le dio la vuelta y celebró con euforia su primer set. El saque dio seguridad a Rublev hasta que en el octavo juego del segundo set se vio con un 0-30 que le hizo dudar.
El ruso se fustigó tras una doble falta con la que encajó el break, el empate del encuentro y el inicio de la remontada de Alcaraz (6-3). El murciano aún encontró oposición en la pegada de su rival, pero también un saque salvador para momentos de crisis. Igualmente, en el intercambio de golpes, el de El Palmar dio un giro de tuerca más y, tras salvar tres bolas de break, rompió en un espectacular golpe cruzado en el séptimo juego del tercer acto.
Tras batallar consigo mismo esta semana, la mejor versión de Alcaraz apareció. Creció entre destellos y menguó a un Rublev que se resistió a entregar la raqueta. En el cuarto set, sin relajarse, el murciano rompió en el quinto juego pero se le resistió otra rotura en un largo 4-3. El ruso soltó la derecha a discreción pero Alcaraz, que cuando hizo falta dio lo mejor, cerró otra declaración de intenciones en la central londinense.
El pupilo de Juan Carlos Ferrero alargó así la mayor racha de su carrera a 22 victorias seguidas; de su condición de rey de la tierra a impoluto en hierba, donde tiene más títulos que derrotas en su carrera. El tenista español se medirá el martes con el británico Norrie quien, con la mística de jugar en casa, superó por (6-3, 7-6(4), 6-7(7), 6-7(5), 6-3) al chileno Nicolás Jarry.