Curiosidades
Jardinería

El sencillo truco que recomiendan los jardineros para que los rosales florezcan a lo bestia en verano

Durante los meses más cálidos del año, es común que algunas plantas reduzcan su actividad debido al calor, la sequía o el exceso de sol directo. Pero no hay que preocuparse, porque con ciertos cuidados es posible mantenerlas activas. En esta línea, los cuidados necesarios para que los rosales florezcan de forma intensa en verano no son complicados, pero sí requieren constancia.

Si planificas adecuadamente y aplicas estas técnicas concretas que serán presentadas a continuación, verás una marcada diferencia en la cantidad y calidad de las flores que nos regalan los rosales durante esta época del año.

¿Cuál es el truco de los jardineros profesionales para que los rosales florezcan en verano?

Varios jardineros profesionales coinciden en una técnica sencilla y accesible para estimular una segunda y más abundante floración: regar los rosales con una mezcla de agua y levadura de cerveza justo después de la primera floración.

Esta práctica mejora la actividad microbiológica del suelo y proporciona nutrientes esenciales para el rebrote. A continuación, se detalla paso a paso cómo aplicar la mezcla:

  1. Disolver entre dos y cuatro cucharadas de levadura de cerveza en dos litros de agua.
  2. Aplicar directamente sobre la base de cada arbusto de rosal.
  3. Realizar la operación después de la primera floración.

Este método, que actúa como bioestimulante, permite que los rosales florezcan con más fuerza al activar el sistema radicular y favorecer la formación de nuevos capullos.

Otros pasos fundamentales para que los rosales florezcan y crezcan sanos

El abonado anticipado es clave para preparar el rosal antes de que las altas temperaturas se instalen. Se recomienda aplicar un fertilizante orgánico rico en nutrientes y, en paralelo, uno específico para floración. Ambos combinados fortalecen la planta y maximizan su producción floral.

Aquí van algunos consejos de fertilización:

En cuanto al riego, es preferible hacerlo temprano en la mañana o al atardecer, cuando la evaporación es menor. El agua debe llegar a las raíces sin mojar las hojas, ya que esto podría favorecer la aparición de hongos.

¿Cómo se podan los rosales?

Para que los rosales florezcan correctamente, es importante mantener la planta limpia de partes que consumen energía sin aportar beneficios. Esto incluye los chupones, que son brotes que nacen en la base del arbusto y no producen flores. También se recomienda eliminar flores marchitas y ramas secas o excesivamente largas.

Estas acciones permiten que el rosal concentre su energía en producir nuevos brotes florales:

¿Cuánta luz deben recibir los rosales para que florezcan?

Aunque los rosales necesitan luz directa para florecer, conviene evitar la exposición excesiva en las horas de mayor intensidad. Una exposición de cuatro a seis horas al día es suficiente.

En algunos casos, es recomendable colocar mallas de sombreo para reducir el impacto del sol en las horas centrales. Además, para proteger las raíces y mantener la humedad del suelo, puede aplicarse acolchado natural (paja, corteza, hojas secas) en la base del arbusto.

Cómo prevenir a tus rosales de enfermedades y plagas

El verano también es una época de riesgo por la aparición de enfermedades y plagas. El oídio, la marsonina y los pulgones son algunas de las amenazas más comunes. Una buena práctica es pulverizar las hojas con una solución de bicarbonato de sodio y jabón líquido cuando aparezcan los primeros síntomas.

Este es el método casero preventivo, detallado paso a paso:

  1. Mezclar dos cucharadas pequeñas de bicarbonato y unas gotas de jabón en agua.
  2. Pulverizar cada cinco días hasta que desaparezcan las manchas.
  3. Retirar las hojas enfermas y desecharlas fuera del jardín.

El uso de fungicidas específicos también es recomendable si las condiciones de humedad son altas o si se han detectado infecciones en plantas cercanas.

¿Cómo se trabaja con rosales trepadores y variedades resistentes?

Los rosales trepadores requieren ser guiados correctamente durante el crecimiento, especialmente en verano, cuando los tallos pueden debilitarse por el calor. Sujetarlos a una estructura firme evita que se partan o se doblen.

Como ocurre con otras variedades, también necesitan varias horas de sol diario para asegurar una floración continua.

Por último, elegir variedades resistentes puede facilitar el mantenimiento. Existen híbridos diseñados para soportar mejor enfermedades comunes, lo cual reduce el uso de productos químicos y mejora la floración.