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Gastronomía

Una pareja estadounidense prueba la tarta de queso asturiana y su reacción no deja lugar a dudas:»creo que he muerto..»

  • Janire Manzanas
  • Graduada en Marketing y experta en Marketing Digital. Redactora en OK Diario. Experta en curiosidades, mascotas, consumo y Lotería de Navidad.

La gastronomía tiene el poder de sorprender a quien la disfruta por primera vez. Es lo que ha ocurrido recientemente con un matrimonio estadounidense que, de visita en Asturias, probó la tarta de queso, uno de los postres más icónicos de la cocina española. No hablamos de la clásica «cheesecake» de Nueva York, sino de la versión cremosa, ligeramente salada y con alma propia que en nuestro país se ha convertido en el favorito de muchos mayores y pequeños.

La escena se ha viralizado gracias a Sophie, una joven que lleva tiempo viviendo en España y que en redes sociales se hace llamar «Sophie la Guiri». En uno de sus vídeos más populares, compartió la reacción de sus padres al probar la  «tarta de queso de verdad», la que se sirve en muchos restaurantes de Asturias sin base de galleta, con un interior cremoso y un sabor a medio camino entre lo dulce y lo salado.

La tarta de queso de Asturias

@sophielaguiri Parte 2 de mis padres americanos probando comida en Asturias 😍🤌🏼🇪🇸 #asturias #fyp #españa #virales #viral #trending #guiri #tiktokespaña #asturiastiktok @katbee97229 @gregbailey602 ♬ nhạc nền – City Lullabies

Para un estadounidense, el término «cheesecake» hace referencia a una «tarta con un relleno suave y cremoso hecho con queso crema y huevos, así como por su base de galleta desmenuzada», tal y como recoge la Pastelería la Mallorquina. En ocasiones, se acompaña de una cobertura de mermelada de frutos rojos, que aporta color y dulzor.

Por eso, cuando un estadounidense llega a España y pide una tarta de queso, lo que recibe rompe completamente sus expectativas. La tarta de queso española tiene una textura cremosa y un toque salado que realza el queso. No es de extrañar que, frente a esta diferencia, muchos extranjeros confiesen que nunca antes habían probado «la verdadera tarta de queso».

La experiencia de Sophie y sus padres

En el vídeo de Sophie, su madre es la primera en probar este postre; su gesto cambia en cuestión de segundos: frunce el ceño, cierra los ojos y asiente como quien acaba de descubrir un universo nuevo. El padre, por su parte, lleva la reacción a un nivel superior. Tras la primera cucharada, se reclina en la silla, cierra los ojos y pronuncia una frase que se ha hecho viral en redes sociales: «Creo que he muerto y estoy en el cielo».

En otros vídeos, Sophie también muestra a sus padres probando platos típicos asturianos como la fabada, el pote o el cachopo. Uno de los momentos más comentados fue cuando probaron tomates aliñados con aceite y sal. Tan sencillo como eso. Acostumbrados a los sabores industrializados de muchos productos estadounidenses, no podían creer que algo tan básico resultara tan sabroso. Llegaron incluso a preguntar varias veces si llevaba «algo más».

Las croquetas, el rabo de toro o el arroz con leche requemado también se ganaron su corazón. Al terminar una de las comidas, el padre resumió la experiencia en un castellano improvisado: «boca fiesta».

Platos típicos asturianos

«Hablar de Asturias es hablar de una tierra donde la gastronomía se convierte en carta de identidad. Quien visita la región no puede irse sin probar la fabada asturiana, plato emblemático que combina fabes con compango en un guiso tan rotundo como reconfortante, ni sin saborear el pote asturiano, heredero de la cocina humilde que con el tiempo se convirtió en un manjar de cuchara imprescindible. La lista continúa con las cebollas rellenas, con sabor minero e historia obrera, y con el pitu de caleya, ese pollo de corral criado en libertad cuya carne recuerda a la caza. Tampoco falta el rollo de bonito, receta marinera que aprovecha todo el potencial del Cantábrico, ni los tortos de maíz, rescatados de la tradición campesina para convertirse hoy en soporte versátil de todo tipo de ingredientes», señala Turismo Asturias.

Y añade: «la despensa asturiana sorprende también por sus sabores del mar y del campo. Están los oricios, un verdadero concentrado de yodo que transmite la bravura del Cantábrico, y las llámpares, lapas que se degustan guisadas o a la plancha y que hablan de la estrecha relación de Asturias con su costa. Como broche dulce, nada más tradicional que los frixuelos, herederos de los carnavales, y el arroz con leche requemado, cremoso, perfumado con canela y rematado con su característica costra de azúcar tostado. Diez platos que resumen el carácter de una tierra donde cada receta cuenta una historia y cada bocado confirma que Asturias es, también, un paraíso gastronómico».

En definitiva, la tarta de queso es mucho más que un simple dulce. Es un emblema de la cocina española y una carta de presentación ante el mundo. La anécdota de Sophie y sus padres es un recordatorio de que, a veces, no hace falta viajar miles de kilómetros para vivir una experiencia transformadora.