Ni vinagre ni bicarbonato: hay un truco mejor para limpiar las persianas de tu casa por la parte de fuera

Cuando llega el verano hay dos opciones en casa. La primera es dejar las ventanas abiertas y permitir que el sol entre hasta que se convierta en un asador. La otra, bajarlas por completo para bloquear la luz y conservar algo de frescor. Suena bien, pero es en ese momento cuando se hace visible lo que durante meses ha permanecido oculto: las persianas. Manchadas, apagadas, con capas de polvo acumuladas.

Esa mugre no desaparece sola, pero lo bueno es que existe un método sencillo y muy eficaz para limpiarlas. Lo mejor es que no lleva químicos agresivos ni hay que desmontarlas.

Este es el sencillo truco para lavar las persianas desde fuera

Sólo se necesita agua y un poco de jabón neutro. Nada más. Ni productos agresivos ni soluciones milagrosas, que suelen ser muy costosas y no siempre representan una mejor opción. Además, el procedimiento es muy sencillo.

Baja la persiana, pero no del todo. Déjala a medio camino para que las lamas queden separadas y puedas acceder bien a las ranuras. Desde el exterior (si tienes acceso), pasa un cepillo de cerdas suaves de arriba abajo. Así quitas el polvo más grueso y la suciedad suelta.

Después, aspira toda la superficie. Esto ayuda a eliminar lo que el cepillo no alcanzó. Ahora viene la limpieza: prepara un cubo con agua templada y un chorrito de jabón neutro. Humedece una bayeta (no la empapes) y limpia en el mismo sentido de las lamas. Enjuaga y escurre bien la bayeta cada vez.

Una vez esté limpia toda la superficie, seca con un trapo de algodón. Si no puedes acceder al exterior, hay solución: abre el cajón superior de la persiana (suele estar dentro de casa), y limpia lama por lama mientras vas desenrollando poco a poco.

Termina con el interior de la persiana, que es más fácil. Sólo hay que pasar la bayeta humedecida y luego secar. Por último, enrolla y desenrolla varias veces para comprobar que todo funciona bien.

Ventajas de lavar sólo con agua y jabón las persianas

Mucha gente piensa que para limpiar a fondo hace falta tener varios productos químicos, pero el jabón neutro demuestra lo contrario.

Usar sólo agua y jabón neutro tiene varias ventajas claras:

• Es más seguro. No estropeas el material, no corres el riesgo de decoloraciones, ni te expones a sustancias tóxicas. Ideal para hogares con niños o mascotas.
• El jabón neutro es suficiente para arrancar la suciedad del día a día. Y combinado con un buen cepillado, no necesitas nada más.
• Sirve para todo tipo de materiales. PVC, aluminio, vinilo… incluso madera (aunque en este último caso puede hacer falta un barniz después, si están muy expuestas).
• No contaminas y evitas verter productos innecesarios al agua.
• Además, es cómodo, pues no hace falta salir a comprar nada.

Por otro lado, si tus persianas son de aluminio y llevan tiempo sin limpiar, puedes usar un limpiador suave multiusos. Pero asegúrate de enjuagar bien. Nada de dejar residuos. Y siempre seca después para evitar que aparezca moho o marcas de agua.