Salud

Este experto advierte: «Dormir después de las 11 engorda»

Este experto advierte: «Dormir después de las 11 engorda»
Janire Manzanas
  • Janire Manzanas
  • Graduada en Marketing y experta en Marketing Digital. Redactora en OK Diario. Experta en curiosidades, mascotas, consumo y Lotería de Navidad.

¿Cuál es la mejor hora para irse a dormir? Existe un gran debate a esta cuestión, y ahora un experto señala que hacerlo después de las 11 engorda. En un vídeo publicado en Instagram, señala que «el sueño es uno de los reguladores del sueño más importantes, pero no solamente a las horas que duermes sino también la hora a la que te vas a dormir».

Y añade: «Este estudio me parece genial a algo que veníamos sospechando y es qué irse a dormir después de las 11 de la noche, por cada hora después de este horario se ve uno aumento de peso entre uno y dos kilos a largo plazo».

La razón por la que no debes dormir después de las 11

«Después de la 11 de la noche, por cada hora posterior que te vas a dormir aumenta entre un 0,1 y 0,3 el Índice de Masa Corporal (IMC), independientemente de las horas que duermas», advierte. «La razón es porque se rompe la biología de nuestro horario interno del metabolismo. Las personas que tienden a irse a dormir después de las 11 de la noche son las persona que más tienden a estar pegadas al teléfono que rompen por completo el ciclo de la melatonina, que también tiene que ver con la regulación del peso», continúa.

 

Ver esta publicación en Instagram

 

Una publicación compartida de Carlos Andres Zapata (@cazamed22)

La falta de sueño puede contribuir al aumento de peso debido a la alteración de los ritmos circadianos, lo que afecta al equilibrio hormonal relacionado con el apetito. La leptina, hormona supresora del apetito, se reduce, mientras que la grelina, hormona del apetito, aumenta en personas con insomnio.

Para mejorar la calidad del sueño, se recomienda establecer horarios regulares para acostarse y evitar actividades estimulantes antes de dormir, como usar dispositivos electrónicos. Estos hábitos, conocidos como higiene del sueño, pueden ayudar a prevenir el sobrepeso y la obesidad.

Hábitos nocturnos que te hacen engordar

Dormir poco puede tener un impacto significativo en el metabolismo, ya que se ha observado que esta falta de descanso puede ralentizarlo, aumentar los niveles de hambre y provocar una mayor producción de la hormona del estrés, el cortisol.

Cabe señalar que las cenas copiosas pueden dificultar la digestión y hacer que el cuerpo tenga dificultades para metabolizar los alimentos de manera eficiente durante la noche. Esto se agrava si te vas a la cama inmediatamente después de cenar, ya que el cuerpo no tiene suficiente tiempo para hacer la digestión.

El tipo de alimentos que se consumen antes de acostarse también puede influir en el peso corporal. Los alimentos fritos, ricos en carbohidratos refinados o picantes pueden ser más difíciles de digerir y pueden afectar negativamente la calidad del sueño.

Además, el uso excesivo de dispositivos electrónicos antes de dormir puede afectar negativamente la calidad del sueño. La luz azul emitida por estos dispositivos puede suprimir la producción de melatonina, la hormona responsable de regular el ciclo del sueño, lo que puede dificultar conciliar el sueño y afectar la calidad del descanso.

Cómo cuidar la higiene del sueño

La higiene del sueño implica una serie de hábitos que pueden mejorar la calidad de nuestro descanso y facilitar la conciliación del sueño. Es fundamental establecer un horario regular para dormir, lo que ayuda a sincronizar el ritmo circadiano y mantener una consistencia en los patrones de sueño. Esto implica irse a la cama y despertarse a la misma hora todos los días, incluso los fines de semana, para evitar desajustes en el ciclo del sueño.

Evitar el consumo de alcohol y tabaco antes de acostarse es otro aspecto importante de la higiene del sueño. Ambas sustancias pueden interferir con la calidad del sueño y dificultar la conciliación del mismo. En su lugar, es preferible optar por actividades relajantes antes de acostarse, como leer o practicar técnicas de respiración.

El ejercicio regular también puede contribuir a mejorar la calidad del sueño, pero es importante evitar hacer ejercicio justo antes de acostarse, ya que puede tener un efecto estimulante que dificulte conciliar el sueño.

Es fundamental no pasar más tiempo del necesario en la cama si no se logra conciliar el sueño. Si después de un tiempo no se logra dormir, es mejor levantarse y realizar una actividad relajante hasta que se sienta sueño nuevamente. De esta manera, se evita asociar la cama con la vigilia y se promueve una asociación más fuerte entre la cama y el sueño.

Mantener un ambiente propicio para el sueño, con una temperatura adecuada y un nivel bajo de luz y ruido, también puede mejorar la calidad del descanso. Es importante encontrar un equilibrio entre aislar el dormitorio del exterior y evitar obsesionarse con el ruido y la luz.

Por último, es recomendable evitar las cenas abundantes y pesadas justo antes de acostarse, así como limitar el consumo de alimentos y bebidas estimulantes que puedan interferir con el sueño.

Lo último en Curiosidades

Últimas noticias