2 ingredientes: así limpian los expertos los cristales de las gafas para dejarlos como nuevos

• Janire Manzanas
• Graduada en Marketing y experta en Marketing Digital. Redactora en OK Diario. Experta en curiosidades, mascotas, consumo y Lotería de Navidad.
• • 05/11/2024 08:00
  • Actualizado: 05/11/2024 08:00

Limpiar las gafas es una tarea que a menudo pasamos por alto, pero es fundamental para mantener ver bien y que las gafas duren en perfecto estado el mayor tiempo posible. Aunque existen productos específicos en el mercado, muchos expertos coinciden en que se puede lograr una limpieza eficaz utilizando sólo dos ingredientes que todos tenemos en casa: agua y jabón. A continuación, te explicaremos cómo limpiar los cristales de las gafas de forma sencilla, rápida y efectiva.

Las gafas suelen acumular suciedad, huellas dactilares, polvo y grasa, lo que puede afectar a la visión. Una limpieza regular es clave para mejorar la visibilidad y, al mismo tiempo, prevenir daños en los recubrimientos anti-reflejantes o en la superficie de los cristales. En este contexto, la combinación de agua tibia y jabón suave no sólo es eficaz, sino también segura. Muchos productos comerciales pueden contener químicos que, aunque prometen una limpieza rápida, pueden ser perjudiciales a largo plazo.

Truco casero para limpiar los cristales de las gafas

Los ingredientes necesarios son muy simples: agua )(preferiblemente tibia, ya que ayuda a disolver la suciedad sin dañar los recubrimientos de los cristales) y jabón líquido para manos o un detergente suave sin fragancia. Evita jabones abrasivos o con productos químicos fuertes, ya que pueden rayar los cristales.

1. Antes de tocar tus gafas, asegúrate de lavar bien tus manos para evitar transferir suciedad o aceites a las lentes.
2. Coloca tus gafas bajo un chorro de agua tibia. Esto ayudará a eliminar el polvo y la suciedad suelta. Es importante no usar agua caliente, ya que puede dañar ciertos tipos de lentes.
3. Pon una pequeña cantidad de jabón suave en tus dedos y frota suavemente las lentes y el marco. Asegúrate de cubrir toda la superficie, incluyendo las patillas y la parte del puente. Este paso es crucial, ya que el jabón ayudará a descomponer la grasa y la suciedad acumulada.
4. Enjuaga bien las gafas bajo el agua tibia. Asegúrate de que no queden restos de jabón, ya que esto puede dejar marcas en las gafas
5. Utiliza un paño de microfibra limpio y seco para secar las gafas. Evita el uso de toallas de papel o prendas de vestir, ya que pueden rayar las lentes. Si no tienes un paño de microfibra a mano, puedes dejar que las gafas se sequen al aire, pero asegúrate de que estén en un lugar limpio.
6. Después de limpiarlas, revisa las gafas en busca de manchas o suciedad. Si es necesario, repite el proceso.

Otras soluciones caseras

El vinagre blanco es otro remedio para limpiar los cristales de las gafas. Su acidez suave ayuda a disolver la suciedad y la grasa de las gafas. Mezcla partes iguales de vinagre blanco y agua en un atomizador. Rocía la solución sobre las lentes y limpia con un paño de microfibra. Además de limpiar, el vinagre también puede ayudar a eliminar olores si las gafas han estado expuestas a ambientes desagradables.

El limón es un limpiador natural gracias a su acidez y propiedades antibacterianas. Mezcla el jugo de un limón con una taza de agua y usa un paño de microfibra para limpiar tus gafas. El aroma fresco del limón es un beneficio adicional. Sin embargo, es recomendable usar esta solución con moderación.

El bicarbonato de sodio es conocido por sus propiedades de limpieza y desodorización. Para limpiar tus gafas, puedes hacer una pasta con bicarbonato de sodio y agua. Aplica una pequeña cantidad de esta pasta en las lentes y frota suavemente con un paño de microfibra. Después, enjuaga con agua tibia. Este método es efectivo para eliminar manchas y también es seguro para la mayoría de las gafas.

Consejos adicionales

Cuidar adecuadamente las gafas garantiza una visión clara, y también prolonga su vida útil. Uno de los aspectos más importantes es evitar el uso de productos abrasivos. Muchos limpiadores domésticos contienen químicos que pueden dañar los cristales, especialmente si tienen recubrimientos especiales. Por ello, es recomendable optar sólo por agua y jabón suave, asegurando una limpieza efectiva.

Además, es crucial guardar las gafas correctamente. Siempre que no las estés usando, mantenlas en un estuche. Estolas protege de rayones, y también previene daños por caídas o aplastamientos accidentales. Un estuche proporciona un ambiente seguro y prolonga la duración de las gafas.

La limpieza regular es otro hábito esencial. Haz de la limpieza de tus gafas un ritual diario. Si no tienes mucho tiempo, una limpieza rápida con agua y un paño de microfibra puede ser suficiente para eliminar las suciedad acumulada. Así, garantizas que las gafas se mantengan en perfectas condiciones.

Por otro lado, si las gafas cuentan con recubrimientos especiales, como los anti-reflejantes o polarizados, es esencial que consultes las recomendaciones del fabricante sobre el cuidado y la limpieza.  Finalmente, si notas rayones profundos o daños en las lentes, es aconsejable consultar a un profesional.