El supuesto expolio nazi del ‘Rue Saint-Honoré’ de Pissarro del Thyssen a juicio en diciembre en EEUU
El juicio por un cuadro de Camille Pissarro supuestamente expoliado por los nazis y que ha supuesto un litigio entre la Fundación Colección Thyssen-Bornemisza y los herederos de Lilly Cassirer, la mujer a la que pertenecía la obra, se celebrará el próximo 4 de diciembre de 2018.
Así lo ha decidido el juzgado de Estados Unidos que lleva este caso, toda vez que en la mediación obligatoria entre ambas partes el pasado 27 de agosto de 2018 no se llegó a un acuerdo, según ha informado el bufete Cremades y Abogados, que representan a la Comunidad Judía de Madrid y la Federación de Comunidades Judías de España, adheridas a la familia Cassirer en esta causa.
Los herederos aseguran que Cassirer se vio obligada a vender la obra por los nazis a bajo precio a cambio de un permiso para salir de Alemania en 1939. La Fundación Colección Thyssen-Bornemisza está apoyada en el litigio por la Abogacía del Estado.
El pasado mes de mayo se conocía que el Tribunal Supremo de Estados Unidos inadmitía tramitar el recurso presentado por la Fundación Colección Thyssen-Bornemisza. Esta decisión implicaba, según fuentes del caso a las que tuvo acceso Europa Press, que la causa volvía al juzgado de distrito, en Pasadena, para que continuara allí su tramitación.
El juez debe decidir si la Fundación Thyssen-Bornemisza sabía o debía haber sabido que el cuadro fue expoliado por los nazis cuando lo adquirió para su colección. En caso afirmativo, la Fundación Thyssen-Bornemisza deberá devolverlo a la familia Cassirer.
La familia Cassirer descubrió en el año 2000 que la pintura de Pissarro, de título ‘Rue st. Honoré, aprés-midi, effet de la pluie’ (Calle Saint Honoré, por la tarde, efecto de la lluvia), se encontraba en el Museo Thyssen y comenzó el procedimiento judicial con el objetivo de recuperarlo.
La obra pertenecía en 1939 a Lilly Cassirer, quien se vio forzada a entregarla a los nazis por un insignificante precio a cambio de un permiso para salir de Alemania, según los reclamantes.
Tras pasar por distintos propietarios, finalmente el cuadro fue adquirido en 1976 por el Barón Thyssen Bornemisza, el cual a su vez se lo vendió a la Fundación Colección Thyssen-Bornemisza en el año 1993.
Primera decisión y revocación
David Cassirer, heredero de Lilly Cassirer, presentó una demanda ante el juez del Distrito Federal de Pasadena (California, Estados Unidos) y éste, mediante una decisión sumaria, determinó que la Fundación Colección Thyssen-Bornemisza era la propietaria del cuadro puesto que, fuese cual fuese el título de adquisición, se había convertido en legítima propietaria de la obra por prescripción adquisitiva conforme al derecho español.
Esta primera decisión judicial fue revocada en julio del pasado año por la corte de Apelaciones del Noveno Circuito de EEUU que ordenó al Juez de Distrito que entrase a valorar si, cuando compró el Cuadro en el año 1993, el Thyssen sabía o debería haber sabido que el mismo procedía del expolio Nazi. En caso afirmativo, el Thyssen se vería obligado a devolver el Cuadro a la familia Cassirer.
Lo último en Arte
-
CaixaForum Madrid acogerá exposiciones de Matisse, Asurbanipal y el desenfoque en el arte durante la temporada 2025-2026
-
Luz y flores mecánicas en movimiento inundan el MUSAC de León
-
Las esculturas de la ‘Reina Mariana’ de Manolo Valdés caminan por Santander
-
ArteSantander, la gran cita artística del verano vuelve con programas propios y nuevos premios
-
David Bailey: el explosivo fotógrafo de ‘La Movida’ de los 60 londinenses está en La Coruña de Marta Ortega
Últimas noticias
-
La Diputación de Pontevedra hace un llamamiento a la cordura en la Vuelta: «Hay que evitarlas…»
-
La lentitud de las obras del Gobierno deja zonas de la DANA de octubre expuestas a nuevas inundaciones
-
Activistas de la flotilla pro-Gaza se van de fiesta y conciertos en Baleares al grito de «¡Free Palestine!»
-
Pánico en un centro comercial de Játiva (Valencia) ante los efectos de un viento huracanado
-
A la caza de tuiteros de derechas