Comunidad Valenciana
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Mazón activa una auditoría del sector público y suprime 6 entidades ‘fantasma’ de Ximo Puig

La auditoría sobre la gestión de los gobiernos de Ximo Puig en el sector público estará acabada con el año en curso

La auditoría constará de dos informes parciales y uno final y el Gobierno de Mazón no descarta llegar a los juzgados

La supresión de las seis empresas 'fantasma' se produce porque su función ya la hacían otros organismos

La Generalitat Valenciana, que preside el popular Carlos Mazón ha activado una auditoría forensic o, lo que es lo mismo, un análisis exhaustivo para detectar posibles casos de fraude y gasto descontrolado para saber a dónde ha ido a parar cada euro durante los ocho años de Gobierno del socialista Ximo Puig. Mazón ha adoptado esta medida tras conocer datos tan demoledores como que en los últimos cuatro años, el Ejecutivo de Ximo Puig gastó 713 millones de euros en 253.122 contratos a dedo.

Unos números que el propio Carlos Mazón ha hecho públicos este martes y que estarán acompañados, entre otras iniciativas de la inmediata supresión de media docena de entidades fantasma, lo que en el argot de la calle se conocen como chiringuitos.

El Gobierno valenciano de Mazón considera que las funciones y servicios para los que esas mismas entidades fueron creadas ya están siendo prestados por alguna de las direcciones generales.

La auditoría

En concreto, y según ha explicado Carlos Mazón, la Generalitat Valenciana realizará «con todos los recursos disponibles» una auditoría conjunta del sector público. El objetivo es poner de manifiesto las duplicidades, «ineficacias» y el rumbo conjunto de esas entidades.

La auditoría se pondrá en marcha en el primer trimestre de 2024. Con un calendario que incluye la elaboración, por parte de la auditora, de dos informes intermedios y uno final, en el que se irán detallando el trabajo que se ha llevado a cabo y las principales conclusiones.

Esos informes intermedios están originados porque el Gobierno valenciano, a tenor de lo descubierto hasta ahora, no descarta que tenga que ir a los juzgados más pronto que tarde.

El conjunto de esa macro auditoría estará concluido con el año. A finales de 2024. Y será entonces cuando se conozca realmente el alcance de la situación, de la herencia de Ximo Puig y su Gobierno.

Supresión de empresas ‘fantasma’

Otra de las medidas inmediatas que va a adoptar el Gobierno de Carlos Mazón es la inmediata supresión de media docena de empresas fantasma o, lo que es lo mismo, de seis entidades cuyas funciones ya llevan a cabo algunas direcciones generales.

Para ello, el Gobierno valenciano aprobará en breve el inicio de un expediente que, posteriormente, llevará ante las Cortes Valencianas para su aprobación definitiva. Ese proyecto de ley incluirá la supresión de las entidades mencionadas.

Y esas entidades, en concreto, son: la Agencia Valenciana de la Energía, la Agencia para la Digitalización y Ciberseguridad, la Agencia Valenciana de Información y Control Alimentarios, cuyas funciones ya desempeña la dirección general de Industria y de la Cadena Agroalimentaria, la Agencia Valenciana de Residuos y Economía Circular, la Agencia Valenciana del Cambio Climático, cuya tarea ya la lleva a cabo la dirección general de calidad y evaluación ambiental, y la Escuela Valenciana de Administración Pública, cuyas funciones ya desempeña la Dirección General de Función Pública. El personal administrativo de esas seis agencias, si lo hay, será destinado a otras áreas.

Los objetivos

El objetivo del Gobierno valenciano de Carlos Mazón es que la legalidad, el interés general, la eficacia, la eficiencia, la transparencia y el control del gasto sean las «bases fundamentales» sobre las que se asiente «la gestión de esta nueva etapa que se abre en el sector público valenciano», según ha explicado Carlos Mazón.

El presidente de la Generalitat ha explicado que un sector público es necesario «siempre y cuando su función y aportación estén justificadas» y si «sirve al interés de todos, si es eficaz y si es transparente». Mazón ha sentenciado, también que «la época de acumular empresas públicas para pagar favores y ejecutar enchufes masivos ha terminado».

Además, ha recordado que cuando llegó a la Generalitat Valenciana «dijimos que habría cambio y lo hubo, que pondríamos fin al Gobierno más caro de la historia y lo hicimos» y ha añadido que «ahora decimos que se ha acabado malgastar el dinero público y lo haremos».

Además, Mazón ha adquirido un compromiso: el de que «le vamos a contar toda la verdad a los valencianos». En este sentido, hay que recordar que Carlos Mazón ya anticipó hace varias semanas en las Cortes Valencianas que una vez concluida la reestructuración y reducción de asesores y cargos públicos, o que en su día se denominó el adelgazamiento de la Administración, los esfuerzos se iban a centrar en el sector público valenciano.

Esa circunstancia englobaba a las empresas que lo componían y, también, a las entidades instrumentales, lo que se ha venido denominando los chiringuitos.

Con sus revelaciones de este martes, el presidente valenciano cumple también con aquel compromiso adquirido en sede parlamentaria. Y está firmemente decidido a llegar  hasta el final en esta tarea en la que ha puesto a trabajar a toda la Generalitat Valenciana.

En un año, cuando acabe este 2024, habrá resultados de esa auditoría. Se conocerá entonces toda la realidad de ese sector público instrumental del Gobierno de Ximo Puig.