Comunidad Valenciana
INCENDIO DE VALENCIA

Los bomberos de Alicante revisan 135 rascacielos para evitar una catástrofe como la de Valencia

Los bomberos del Ayuntamiento de Alicante revisan los recubrimientos de las fachadas de los rascacielos para evaluar riesgos

Las revisiones de los edificios más altos de Alicante arrancan sólo 96 horas después del pavoroso incendio de Valencia

Un equipo conformado por seis bomberos , cuatro bomberos y dos cabos, del Servicio de Prevención y Extinción de Incendios y Salvamento (SPEIS) del Ayuntamiento de Alicante, ha iniciado este lunes la revisión de los materiales de las fachadas de los 135 edificios más altos de la ciudad de Alicante. Los bomberos intervinientes en la citada revisión cuentan con titulación técnica en arquitectura e ingeniería industrial. El proceso ha arrancado sólo 96 horas después del trágico incendio de dos edificios en Valencia, que se ha cobrado diez vidas humanas. En apenas unas horas han quedado revisados 90 de los 135 Edificios de Gran Altura (EGA) de la ciudad de Alicante.

El incendio de Valencia ha abierto un importante proceso de reflexión acerca de los controles y seguridad en los edificios más altos de las ciudades. Pero, quizás, el más rápido en tomar medidas concretas ha sido el Ayuntamiento de Alicante, que en las horas que van de la tarde de este jueves al lunes ha creado, en el área que dirige el concejal Julio Calero, un grupo específico dentro del que evalúa los edificios de gran altura.

Este nuevo grupo tiene por objetivo el de comprobar los materiales de que están hechas las fachadas de los 135 mayores rascacielos urbanos de Alicante. Se pretende que el pavoroso incendio de Valencia no tenga una replica en Alicante.

Revisan edificios de más de 10 alturas

La tarea que han puesto en marcha los bomberos del Ayuntamiento de Alicante arranca con una primera revisión visual. Una vez ésta concluye y en caso de que se considere necesario se procede a realizar las comprobaciones oportunas de los materiales con los equipos de altura, así como aquellas cuestiones que puedan considerarse técnicamente necesarias.

El listado del Servicio de Extinción y Protección de Incendios y Salvamento (SPEIS) del Ayuntamiento de Alicante arroja la existencia de un total de 135 edificios que superan las diez alturas. Se trata de los denominados EGA (Edificios de Gran Altura).

La revisión de este lunes ha arrancado en aquellas ubicaciones urbanas que ofrecen unas peores condiciones de acceso. En este caso, el centro tradicional de Alicante. Para, de ahí, trasladarse a barrios de la ciudad de Alicante que ofrecen un entorno más accesible. En la primera mañana, han quedado revisadas un total de 90 de las 135 edificaciones en cuestión.

En su revisión, los bomberos han tenido «especialmente» en cuenta la normativa de la edificación vigente y, sobre todo, la fecha de construcción de los edificios. Esto último, porque se da la circunstancia de que la normativa ha sufrido importantes cambios desde 2005 a 2019. Así, los materiales utilizados en las fachadas también han ido sometiéndose a mayores exigencias en las últimas revisiones de la normativa.

El concejal de Seguridad Ciudadana del Ayuntamiento de Alicante Julio Calero ha explicado que tras el incendio de Valencia «y el papel que jugaron los materiales colocados en la fachada para la rápida propagación del fuego, se ha creado un grupo específico» que evalúa los EGA de Alicante. Su objetivo es: «Comprobar los materiales de las fachadas de los 135 edificios más altos de la ciudad y establecer una catalogación de riesgo».

Defensa de los Bomberos

Precisamente, este lunes los bomberos del Consorcio Provincial de Valencia han emitido un comunicado en el que afirman que: «La magnitud del incendio estructural al que se hizo frente fue, sin duda alguna y con diferencia, la del mayor incendio estructural en la historia de la Comunidad Valenciana».

Y agregan que: «Las decisiones adoptadas por las primeras dotaciones del Cuerpo Municipal de Bomberos de la ciudad de Valencia que llegaron al lugar fueron críticas y urgentes, condicionadas tanto por la cantidad de ocupantes como por el virulento desarrollo del incendio».

Un mensaje que es, de facto, de apoyo a sus compañeros y a la tarea que desarrollaron en la extinción.