Ciencia
Investigaciones médicas

Un nuevo estudio desvela cómo podría impedir la metástasis del cáncer

Los enfermos de una de las patologías más graves del mundo saben que llegada la metástasis del cáncer, por desgracia, queda poco por hacer. Sin embargo, ahora recibimos información interesante y muy esperanzadora, ya que un nuevo estudio afirma que podría impedir este fenómeno, lo que sería un punto enorme a favor de la ciencia en la lucha contra el cáncer.

La metástasis, como sabrás, es la fase más grave de un proceso cancerígeno, pues las células del tumor primario invaden el aparato circulatorio, por lo que ganan con ello acceso libre a todo el cuerpo creando un verdadero ‘destrozo’ que, generalmente, acaba con la vida de la persona que sufre esta cruel enfermedad.

Aunque en contados casos se puede luchar contra la metástasis, esta fase suele ser letal, por lo que, una vez se llega a ella, es muy probable que el paciente acabe por perder su vida.

Como es lógico, investigadores y especialistas de todo el planeta llevan años tratando de encontrar una solución a esta enfermedad, intentando impedir que los afectados no desarrollen la fase de la metástasis. Y, a tenor de un nuevo estudio publicado en la revista Nature, este avance médico espectacular podría estar más cenca de lo que creemos, pues tal vez se habría encontrado una solución por fin.

Cómo luchar contra la metástasis del cáncer

Según los expertos, un cáncer no se puede expandir a no ser que, además de poder ingresar en la corriente sanguínea, las células tumorales vulnerables del sistema inmunológico no encuentran la forma de salir del torrente sanguíneo, para lo que han de atravesar la barrera del endotelio.

Ahora, a tenor de los datos aportados por la investigación de la Universidad alemana de Goethe junto con el Instituto Max Planck, podemos saber cómo se produce esta fuga de células. Es decir, que si somos capaces de evitar que este hecho suceda, lograremos que el cuerpo no entre en esta fase letal de expansión cancerígena.

Para entender este proceso, los científicos han experimentado con ratones, logrando deshabilitar una molécula especial que sería la responsable de que se abra la brecha por la que el cáncer se expande por todo el organismo a través de la metástasis.

En animales que habían sido modificados genéticamente, se observó que la incidencia de la metástasis cancerígena era mucho menor.

De momento, no deja de ser un estudio esperanzador, pero en fase muy incipiente. Ahora, toca realizar mayores pruebas antes de experimentar en seres humanos para saber con certeza si desactivando esta molécula se genera un detrimento de la metástasis sin activar otros efectos colaterales.