Reino Unido podría prohibir la perforación de las orejas en bebés

Prácticamente todas las mujeres desde que nacemos contamos con un complemento en nuestras orejas: los pendientes. Y es que ya incluso estando en el hospital son las matronas las que, si así lo desean los padres, se encargan de perforarles las orejas a las recién nacidas para que puedan ya ir muy coquetas.

Esto sucede en multitud de países. No obstante, hay algunos en los que esa cuestión está ahora en entredicho y sobre la mesa. Este sería el caso de Reino Unido.

¿Qué sucede en Reino Unido?

Lo que ha sucedido y ahora ha trascendido a los medios de comunicación de todo el mundo es que en el citado país británico se está impulsando una nueva iniciativa en pro de acabar con las perforaciones de orejas en bebés. ¿El motivo? Que quienes la han puesto en marcha consideran que es absolutamente una crueldad hacia el colectivo infantil, concretamente hacia el femenino.

Situación actual

Desde que se decidiera darle forma a esa iniciativa ya son más de 40.000 firmas las que se han conseguido reunir con el claro objetivo de que en el país se prohíba la citada perforación. Y es que hay un elevado porcentaje de personas que consideran que, además de ser cruel, es un acto que atenta contra la libertad del individuo. Sí, creen que cuando la niña sea mayor debe tener la capacidad y el derecho a elegir por sí misma si quiere tener agujeros o no en sus orejas.

Perforación de orejas en bebés. Lo que hay que saber

Mientras el debate sigue creciendo en la sociedad inglesa, muchas son las familias de otros rincones del mundo que consideran que sí desean perforar las orejas de sus pequeñas. Familias que, previamente a acometer esa acción, deben tener en cuenta los siguientes datos:

• Los médicos coinciden en subrayar que, nada más nacer, el cartílago de las orejas de las niñas es más delgadito por lo que resulta más fácil y menos doloroso el perforarlo.

• En los hospitales los doctores o matronas pueden acometer esa tarea y lo habitual es que procedan a llevar a cabo la misma haciendo empleo del propio pendiente que lucirá la recién nacida.

• Es importante que los pendientes que se le vayan a colocar al bebé no cuelguen, para evitar que pueda arrancárselos y herirse las orejas, y que además deben ser de oro, para que no se puedan producir alergias.

• La perforación se realiza sin anestesia y dura unos pocos segundos.

• Es vital que, una vez acometidos los agujeros, se cuiden bien estos para que no aparezcan infecciones. Por ese motivo, es necesario saber que los pendientes iniciales deben permanecer como tal durante al menos seis semanas y cada día es imprescindible que se muevan.

• Siempre que se toque las orejas de la niña debe hacerse con las manos muy limpias y sin hacer movimientos bruscos que puedan causarle daño.

• Otro cuidado fundamental es que después de cada baño se le seque muy bien la zona de los pendientes.