¿Cuándo llevar a nuestro hijo a la guardería?
La situación actual de los padres de hoy dista mucho de la situación que tenían nuestros abuelos. Las exigencias del trabajo, las familias mono parentales, horarios interminables… son situaciones con las que hay que contar a la hora de decidir la entrada del niño en la guardería.
Lo más habitual ante la imposibilidad de hacerse cargo del niño durante el día es llevarlo al citado centro infantil. Y, en ese sentido, los expertos recomiendan retrasar lo máximo posible ese momento, puesto que cuando más edad tenga el niño, mejor desarrollado estará su sistema inmunitario y menos probabilidades tendrá de contagio de enfermedades.
En las guarderías, al haber un número considerable de pequeños, es el lugar donde más fácil es que nuestro hijo enferme, sobre todo, con patologías comunes como otitis, catarro, diarrea… Sin embargo, esto no quiere decir que aquel vaya a ponerse malo precisamente en y por la guardería, pero las probabilidades son altas.
Por ello, no debemos olvidar que si el niño está enfermo, como por ejemplo de varicela, no es conveniente llevarlo al centro pues es la manera de evitar que otros niños se contagien.
Pero aparte de la guardería, existen otras alternativas a la hora de dejarlo en manos de cuidadores profesionales a nuestro hijo:
- Una es el mediante el cuidado en la propia casa, aunque esta opción normalmente es poco probable que se pueda llevar a cabo debido a las circunstancias actuales de los padres en general, aunque siempre hay excepciones.
- Otra alternativa que ya se realiza en la mayoría de países europeos y que, poco a poco, se está instalando en España es el cuidado de los niños en grupos pequeños en casas de otros pequeños. Se conoce como family day-care y debido a que el grupo es más reducido que en una guardería, el riesgo de contagio de alguna enfermedad es menor.