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10 consejos para que los niños hagan los deberes por su cuenta

Estar en otra estancia, organizar un horario o despejar cualquier distracción son algunos de los consejos que podemos aplicar para conseguir que los niños hagan los deberes solos.

Los niños ya han comenzado su rutina escolar, y seguramente tendrán que hacer deberes en casa por las tardes. Si es así, es posible que nos pidan ayuda en todo momento y aunque no se la debemos negar, también es importante que aprendan a hacer solos sus deberes de modo que puedan aprender también en el caso de que se equivoquen. Veamos a continuación, 10 consejos para que los niños hagan los deberes por su cuenta.

10 consejos para que los niños hagan los deberes por su cuenta

Los diez consejos que os ofrecemos a continuación, os servirán para que los niños se organicen mejor a la hora de hacer sus tareas escolares y también que puedan hacer los deberes solos sin problema. Piensa que a determinadas edades es necesario que los niños investiguen por su cuenta y averiguen como hacer sus tareas, aunque no tenemos porqué dejarlos de lado. Podemos decirles que estamos ahí por si nos necesitan pero que intenten hacerlos solos.

1. Limita el tiempo

Organizar un horario para hacer los deberes es una de las claves para conseguir que los niños hagan las tareas solos. Debemos establecer las horas por la tarde entre semana o, en el caso del fin de semana, el sábado, de lo contrario el domingo después de la cena corremos el riesgo de tener que ayudarlo a colorear el dibujo o estudiar esa página que surgió a última hora en el grupo de whatsapp.

2. Ayúdalo a organizarse

Leamos juntos las tareas del diario, calculemos cuántas horas tienen disponibles y veamos cómo dividir los distintos temas (primero los más difíciles), asegurándonos de que después haya tiempo para ir al parque o para que se dediquen a jugar un poco. Tener un patrón a seguir les hace querer comprometerse.

3. Está prohibido sentarse junto a al niño o niña

Si tenemos que trabajar con nuestro ordenador o hacer cualquier otra cosa, es mejor que lo hagamos separados del niño o niña porque puede que entienda que estamos 100% disponibles y ya no nos dejará ir.

4. Mantente cerca, pero a una distancia segura

Una cosa es estar disponibles y otra muy distinta hacer los deberes con los niños. Es mejor que vean que estamos haciendo otra cosa en otra estancia, pero que si nos llaman podemos responder o acudir a esa llamada a ver qué quieren. Ahora no nos quedemos a su lado ya que entonces seguramente pasaremos la tarde haciendo deberes.

5. El ‘golpe y fuga’

¿No llama constantemente para pedir ayuda? Como hemos dicho, tenemos que ir, responder a su duda, luego le decimos que tenemos algo más o menos urgente (ropa para colgar, una llamada de negocios) que hacer, sugiriendo que mientras tanto intente hacerlo solo. Cuando regresemos, lo más probable es que ya haya completado la tarea.

6. Sí al refuerzo positivo

Si el niño o niña nos llama para que comprobemos si han hecho bien sus deberes, debemos responderles que sí en el caso de que hayan acertado, pero si no es así, no tenemos que darles la respuesta sino que debemos decirles que no está bien y que deben arreglarlo. Sí que podemos sin embargo, darle alguna que otra pista para ayudarle.

7. Despeja el «campo de batalla»

Apaga el televisor, haz desaparecer los videojuegos y libera el escritorio de todo lo que no necesitas. Son distracciones que ponen en riesgo la concentración. Y la capacidad de hacerlo solo.

8. Mantén alejado al hermano pequeño

Si hay un hermanito en casa, mantengámoslo ocupado con otro asunto durante su tarea, de lo contrario el pequeño terminará molestando a su hermano o hermana para que haga los deberes y puede que incluso se peleen.

9. No te detengas en discursos inútiles

¿Tu hijo o hija se queja porque los profesores le dan demasiadas tareas, no tiene tiempo para jugar y así sucesivamente? Mejor afrontemos el problema de cara: entendemos su estado de ánimo, pero si los profesores le han asignado esas tareas significa que él mismo puede hacerlas. Y si un concepto no está claro, debe dejarlo para preguntárselo al profesor/a cuando vuelva a clase.

10. Si se equivocan, ten paciencia

A veces los niños nos piden ayuda porque perciben nuestra ansiedad de que la tarea sea perfecta. Dejemos que la escuela sea la parte docente de la disciplina: ¿no completó la tarea?  No debemos preocuparnos ya que es mejor que pregunte en clase aquellas cosas que no entiende y que le han llevado a entender la tarea.