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PRIMERA DIVISIÓN / JORNADA 11

Una victoria en siete jornadas: suenan las alarmas en el Mallorca

El equipo ha pasado de estar en una situación cómoda a verse amenazado con el descenso

Acabará la jornada en la posición 16ª tras el Almería-Girona de hoy

El sábado juega en Valencia, ya con Muriqi a disposición de Aguirre

1-0. El VAR acerca al Mallorca al precipicio

Más allá de los errores arbitrales o de la mala suerte que ha tenido el equipo en determinados partidos, los números del Mallorca empiezan a ser alarmantes: en las siete últimas jornadas sólo ha conseguido una victoria, en Son Moix ante el Almería, y ha pasado de estar situado en una zona cómoda a acabar hoy la décima jornada a dos o incluso un punto del descenso, según cual sea el resultado del partido Almería-Girona.

El Mallorca cerrará hoy la décima jornada en decimosexta posición. Perderá un puesto pase lo que pase en el Almería-Girona, ya que uno de los dos le superará en la clasificación. El peor escenario sería una victoria local, que dejaría a los de Aguirre a tan sólo un punto de posiciones de descenso, inmediatamente delante de los tres últimos clasificados, el Elche, con tres puntos, el Cádiz, con siete, y el Getafe, con nueve, pero con peor golaveraje que los mallorquinistas.

La buena noticia para Aguirre es que se acabó la sanción a Muriqi. La ausencia del delantero kosovar se volvió a notar en el césped del Reale Arena como ya sucedió en la pasada jornada en Son Moix ante el Sevilla. Por suerte el máximo goleador del equipo podrá volver al once el próximo sábado en Valencia, una vez cumplida su sanción. También se espera en Mestalla el regreso de Jaume Costa, una vez recuperado de su lesión.

Otro que emitió buenas sensaciones en San Sebastián fue el ghanés Amath, a quien el VAR anuló de manera injustificada un verdadero golazo. Amath demostró estar recuperado de su lesión y haber encontrado de nuevo la chispa y la velocidad que le convirtieron en un jugador imprescindible en el ascenso a Primera División. Sin duda va a ser un complemento fantástico para Muriqi, que en muchas ocasiones actúa arriba en solitario, con pocos apoyos.