La mitad de los comerciantes de Baleares tildan de positiva la temporada y piden rebajar impuestos
Lamentan la falta de personal debido al alto coste de vida y la temporalidad
Valoran como positivo o muy positivo el impacto del turismo en su actividad
La mitad de los comerciantes de Baleares tildan de positiva la temporada turística y piden rebajar impuestos, según el estudio presentado este viernes por la Confederación Balear de Comercio (CBC), donde se extraen las principales conclusiones sobre el impacto de la temporada turística de 2024 en el sector comercial de las Islas.
En un acto liderado por el presidente de la CBC, Mateo Cunill, acompañado por el director general de Comercio del Govern Balear, José Antonio Caldés, y las presidentas de AFEDECO y PIMECO, Joana Manresa y Carolina Domingo, se han expuesto los datos clave que reflejan los desafíos estructurales y las expectativas para 2025.
Más del 50% de los comerciantes considera la temporada positiva, destacando una estabilidad en comparación con años anteriores. Sin embargo, un 35% la califica como «regular», reflejando crecimientos desiguales entre islas y sectores.
Entre los problemas estructurales que los pequeños empresarios han destacado, en primer lugar figura la falta de personal (44%) como principal problema, debido al alto coste de vida y la temporalidad; el aumento de costes (23,9%) en relación al alquiler, energía y transporte, que provoca una reducción de los márgenes de ganancia y, en tercer lugar, la competencia online que les exige una adaptación rápida, aunque no todos los negocios tienen recursos para ello.
Para el pequeño comercio, el turismo sigue siendo el motor económico, con un 54,58% de los encuestados evaluando su impacto como positivo o muy positivo y un 38,52% que considera que no todo el volumen de turistas se traduce en gasto significativo.
Por contra más del 57% de los comerciantes afirma no haber visto iniciativas de dinamización comercial en sus áreas mientras iniciativas de restricción a la movilidad como las denominadas Zonas de Bajas Emisiones generan controversia porque, de hecho, un 47,97% considerando que perjudican la actividad comercial.
En cuanto a las expectativas para 2025 más de la mitad de los encuestados (50,98%) se muestra optimista, aunque casi un 40% se mantiene neutral debido a retos como los altos costes operativos y la falta de personal.
Como retos destacados, apuntan a la necesidad de reducir la presión fiscal (50,84%) como elemento «clave» para aliviar la situación de los pequeños comercios y señalan la necesidad de aprobar mejoras en movilidad y accesibilidad, lamentando, en este sentido, la falta de aparcamiento y las restricciones de tráfico que limitan el acceso a zonas comerciales. Por ello, proponen para el fomento de oportunidades comerciales (17,86%) la realización de eventos, ferias y campañas de dinamización.
Como principal conclusión de esta evaluación anual, la patronal del pequeño comercio balear destaca que el sector «ha demostrado resiliencia tras años de incertidumbre» y a partir de ahí exige la puesta en marcha de estrategias integrales que combinen políticas públicas efectivas, colaboración público-privada y un enfoque sostenible para garantizar la competitividad del sector.
«Con medidas como la reducción de costes fiscales, mejoras en movilidad y mayor apoyo a la innovación, el comercio balear puede consolidarse como un pilar clave para la economía de nuestras islas», ha destacado Mateo Cunill durante la presentación.