OkBaleares
100 días de Govern / Entrevista con la presidenta de Baleares

Marga Prohens: «Que un político decida amnistiar a otro político porque necesita sus votos es corrupción»

"Con la amnistía se ataca un principio básico del Estado de Derecho: la igualdad de los españoles ante la ley"

"Feijóo nos devolvió la confianza y ganó las elecciones, es impensable plantear ahora un cambio de líder"

"Con Armengol todo era propaganda, no había gestión y nos hemos encontrado miles de expedientes sin tramitar"

«Que un político decida amnistiar a otro político porque necesita sus votos para una investidura es un acto de corrupción». Así lo afirma la presidenta del Govern de Baleares, Marga Prohens, al analizar la gestión del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y sus negociaciones con los independentistas. Sobre el anterior Govern de Armengol resalta la «falta de gestión». «Hemos encontrado 13.000 expedientes paralizados en Transición Energética y esto que gobernaban los que decían que creían en la transición energética y en las renovables», afirma Prohens.

P.- ¿Qué opina de las decisiones que está tomando el Gobierno de Pedro Sánchez, sus pactos con Bildu y los independentistas, los indultos y la Ley de Amnistía?

R.-Cuando no se tienen principios, cuando no se tienen límites, cuando lo único que te interesa es el poder por el poder y continuar un día más, pasan estas cosas. Yo creo que es gravísimo todo lo que estamos viviendo. Creo que la amnistía es gravísima porque supone el hecho que el Estado pida perdón,  que el Estado reconozca que se equivocó en su actuación en aquel mes de octubre que todos recordamos de Cataluña y lo que pasó las semanas posteriores. Se pretende acabar con un principio básico del Estado de Derecho, que es la igualdad de los españoles ante ante la ley. Ahora, si se aprueba esa amnistía los españoles dejaremos de ser iguales ante la ley. Habrá españoles de primera y españoles de segunda, dependiendo de si Pedro Sánchez necesita nuestros votos o no. Que un político decida amnistiar a otro político porque necesita sus votos para una investidura es un acto de corrupción.

P.-El PP, con Alberto Núñez Feijóo, ganó las elecciones generales pero no va a poder gobernar. ¿Sigue confiando en Feijóo para unas futuras elecciones o cree que ha llegado el momento de cambios y de apostar por Ayuso?

R.-Es impensable que ahora iniciemos este debate. Feijóo ganó las elecciones tras coger las riendas del PP en el momento más complicado y más delicado de la historia del partido. Nos devolvió la confianza en nosotros mismos, nos devolvió los ánimos y no sólo volvimos a conectar con la calle, sino que ganamos las elecciones autonómicas y municipales. Hoy la inmensa mayoría de españoles están gobernados por un gobierno del Partido Popular, bien sea en su Comunidad Autónoma, en su Consell, en su Diputación o en su Ayuntamiento. No solo consiguió esto, sino que un mes después, el 23 de julio, unas elecciones que nadie esperaba, el PP volvió a ganar y obtuvo un gran resultado. Entonces, yo no creo que haya que iniciar ningún tipo de reflexión. Creo, de hecho, que el único partido que tiene muy claro quiénes son sus principios, cuáles son sus líneas rojas y quién es su líder es el Partido Popular.

P.-¿Ahora que lleva 100 días como presidenta y ha podido analizar el estado de la Comunidad Autónoma, qué opina de la gestión de Armengol?

R.- Hemos encontrado lo que sospechábamos. Que había mucha propaganda, mucho titular, mucho decorado de cartón piedra y muy poco trabajo. Hemos visto que había una parálisis total de la Administración pública y que se había convertido en un quebradero de cabeza para los ciudadanos y en una merma a la competitividad para las empresas. Hemos encontrado 13.000 expedientes paralizados en Transición Energética y esto que gobernaban los que decían que creían en la transición energética y en las renovables. Resulta que hay un año y medio de espera en la valoración de la dependencia cuando todo el día nos hablaban del escudo social. Miles de expedientes en Medio Ambiente caducados, expedientes que no se pueden tramitar y con sanciones que que ya no se pueden aplicar. Con Armengol hubo mucha falta de trabajo, una gran falta de proyecto y sobre todo muchísima dejadez en todos los departamentos y en todas las instituciones.