El Govern de Armengol defiende la expulsión de 2.500 celadores sanitarios por no saber catalán

La consellera de Salud y Consumo, Patricia Gómez, ha afirmado este martes que en relación al requisito del catalán para el personal sanitario «solo se está aplicando la ley». En el pleno del Parlament, la diputada de Vox Idoia Ribas se ha referido a la demanda colectiva por celadores «expulsados» por no tener el título de catalán. En Baleares gobierna el pacto de izquierdas presidido por la socialista Francina Armengol con el apoyo de Podemos y los independentistas de Més.

Ribas ha criticado que exigiendo ahora de forma retroactiva a los celadores la capacitación en catalán se está negando el trabajo a 2.500 profesionales. ¿Necesitamos que el celador que nos lleva a hacernos un TAC sepa catalán»?, se ha preguntado la diputada, que ha calificado el requisito como «ridículo y absurdo».

La consellera, por su parte, ha insistido en que en los procesos selectivos se está cumpliendo la ley, así como dos sentencias del Tribunal Supremo, que fija que el personal laboral y estatutario tiene que cumplir con unos niveles de capacitación. Además, ha recordado que el nivel exigible es un B1, algo «asumible.

El 22 de septiembre del pasado años OKDIARIO desvelaba que la Conselleria de Salud  había convocado un concurso de méritos para la confección de una bolsa de interinos para el Servicio de Salud al que se presentaron unos 7.000 aspirantes. Desde el principio, 2.500 quedaron excluidos por no tener el título de catalán y todo esto a pesar de la falta de personal en todos los campos que sufre la sanidad balear desde hace años y más desde el inicio de la pandemia del coronavirus.

La Conselleria de Salud, con Patricia Gómez (PSOE) al frente, aplicó el decreto de 18 de noviembre de 2016 aprobado por el anterior pacto de izquierdas que establece que entre los requisitos para entrar en las bolsas de interinos está el conocimiento del catalán.

Hasta la aprobación de este decreto el conocimiento del catalán era un mérito pero no un requisito. En el ámbito sanitario la norma afecta a los celadores pero también a todo el personal, médicos y enfermeras incluidos, lo que ha generado constantes protestas del sindicado médico Simebal y más en esta época de crisis sanitaria.

En ocasiones se han hecho excepciones a la aplicación del decreto pero en esta ocasión no fue así ante las presiones de los soberanistas de Més para imponer el catalán en todos los ámbitos, incluso en las comisarías de la Guardia Civil y Policía Nacional.