El exdefensor del Menor en Baleares: «Políticos y técnicos no supieron atender a las menores abusadas»
Serafín Carballo denuncia la falta de preparación de los profesionales para atender los casos de explotación sexual
Considera que el Consell de Mallorca tenía que haber aceptado una comisión de investigación
Estalla otro caso de abusos a menores tuteladas en Baleares cuando el PSOE niega toda responsabilidad
Una de las declaraciones más esperadas de la mañana de hoy ante la Misión Europea que investiga los casos de abusos sexuales en Baleares a menores tuteladas por el Consell de Mallorca era la del exdefensor del Menor, Serafín Carballo, que en la actualidad no ostenta cargo político alguno, y que reconoció en declaraciones a OKBALEARES que cuando estallaron estos casos, «ni la clase política, ni los trabajadores y técnicos estaban preparados para abordar estos hechos».
«Han actuado como sabían, porque ahí han estado todos los partidos, menos Vox, y el tema de explotación estaba un poco camuflado debajo del abuso pero no había conciencia de que éste era un problema que requería de un trabajo específico».
«No es que trabajaran mal,», abunda Carballo, «es que estuviera quien estuviese, ni la clase política ni los profesionales sabían cómo había que trabajar porque los pedófilos buscan en las redes sociales el contacto con estos menores que son vulnerables, y éstos se prestan a ello».
En este sentido, Carballo ha propuesto a los integrantes de la Misión Europea la necesidad de que en Baleares exista un Síndic de Greuges autonómico (equivalente al Defensor del Pueblo) que tenga capacidad y competencias suficientes para que pueda hacer una supervisión de los centros y de la atención a la infancia.
De esta forma, el Defensor del Menor pasaría a depender de esa figura y se paliaría la falta de competencias limitadas que tiene en la actualidad, que se circunscriben a la atención de quejas por posible vulneración de derechos y a procurar que la atención sea adecuada, «pero sin competencias ejecutivas ni sancionadoras sino que, en todo caso, ha de poner en manos de Fiscalía si hay una vulneración del derecho de un menor».
Para Carballo, en estos momentos la situación de la explotación sexual infantil pone en evidencia que «no es una cuestión de políticos que lo hacen bien o no», aunque remarca que el Consell de Mallorca y el Instituto Mallorquín de Asuntos Sociales (IMAS), de quien depende la tutela de los menores, «tenía que haber aceptado una comisión de investigación porque yo creo que no hay nada que ocultar, y el hecho de que el expresidente del IMAS, Javier de Juan, reconociera que tenía 16 casos de explotación sexual fue un acto de valentía porque sabemos que en todas las comunidades se da pero nadie lo quiere reconocer».
Con más de 37 casos de abusos de menores tuteladas contabilizados hasta el momento en Baleares, Carballo reitera que «es un tema que no se sabía estudiar muy bien».
«Lo que llega a los centros de menores son jóvenes que no se dejan proteger, y un perfil de adolescentes que no existía antes. Menores erotizadas, con una banalización de la sexualidad, con una adoración al culto del lujo y con problemas de drogadicción, que es caldo de cultivo para que el depredador sexual actúe y, ante esta realidad, el sistema de protección se ha encontrado con un tipo de chicos y chicas para las que no había ningún tipo de preparación».
Por último, el ex defensor pone el acento en la falta de preparación y de especialistas en la materia, «porque ni las universidades están preparando a estos expertos, y los equipos educativos tienen que estar muy entrenados para que no entren en estos centros gente por tener un diploma, sino personas que han pasado un proceso de selección, pero claro, los equipos educativos son muy inestables, están muy mal pagados y tienen que rotar de un centro social a otro».