Andalucía
Violencia de género

La mujer asesinada en Pozoblanco denunció a su pareja en 2017 y estaba en trámites de separación

La mujer asesinada este martes en Pozoblanco (Córdoba) a manos de su pareja, un hombre que luego se suicidó, ya lo denunció en 2017 por violencia de género, cuando la víctima contaba con 25 años. El juez dictó entonces contra el ahora presunto asesino una orden de alejamiento sobre la mujer durante cuatro meses y ambos fueron incluidos en el Sistema de Seguimiento Integral de los Casos de Violencia de Género (VioGén).

Además, la pareja se encontraba en trámites de separación. La mujer llevaba algunas semanas buscando un piso de alquiler en Pozoblanco, según recogen sus redes sociales. «Busco urgente piso de tres habitaciones o dos, ya me da igual, pero me urge para antes de 10 días», es uno de los mensajes que aparecen publicados en su perfil de Facebook.

A pesar de las denuncias previas por violencia de género y de estar ambos incluidos en el sistema VioGén, el caso estaba inactivo desde 2018 y ya no existían medidas de protección ni orden de alejamiento en vigor. No constan denuncias posteriores de la mujer contra su pareja y la víctima tampoco era usuaria actual de los servicios que presta el Instituto Andaluz de la Mujer (IAM) a las mujeres víctimas de violencia de género, tal y como ha confirmado la Junta de Andalucía.

La mujer era natural de Villanueva de Córdoba, una localidad ubicada a 22 kilómetros de Pozoblanco, donde vivía desde que comenzó la relación con su presunto asesino, con el que ha tenido tres hijos todavía menores de edad.

Fue una de las hijas de la familia, de 3 años, quien encontró los cadáveres de su padre y de su madre, según han indicado a Efe fuentes próximas a la investigación. La niña estaba en el domicilio donde se ha cometido el crimen y, al escuchar los ruidos en la vivienda y entrar en una de las habitaciones, encontró los cadáveres de sus padres. Se dirigió entonces a casa de su vecina, que fue la que dio la alerta a la Policía Local. Los tres hijos han quedado ahora a cargo de los abuelos paternos.

Los cadáveres presentaban heridas compatibles con arma de fuego y la Guardia Civil halló en el escenario del crimen una carabina de aire comprimido con la que, presuntamente, se habría consumado el asesinato.

Multitud de vecinos de Pozoblanco se han manifestado este martes para expresar «la repulsa» de la localidad ante este nuevo caso de violencia de género. El Ayuntamiento ha decretado dos días de luto y su alcalde, Santiago Cabello, ha manifestado su «profundo pesar por la tragedia que hemos vivido y que nos ha conmocionado a todos».