Andalucía
Alarma social en Sevilla

Así actúan los ‘Crips’: una violenta banda de menores extranjeros que atemoriza Sevilla

La Policía Nacional de Sevilla está muy alerta tras la llegada a la capital hispalense de una banda de menores extranjeros muy violentos que se hace conocer como los ‘Crips’. Por el momento, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado (FCSE) ya ha detenido a tres menores de edad de la citada banda por delitos de robos con fuerza, coacciones, lesiones y delitos contra la integridad moral. 

«Hasta ahora en Sevilla no se había encontrado nada parecido», explican fuentes policiales, que remarcan que estos menores extranjeros son de «diferentes orígenes étnicos». «La pronta detección de los mismos resultan claves para evitar la consolidación de este tipo de bandas juveniles», continúan.

La Policía Nacional inició la investigación a raíz de denuncias e informaciones propias de sus labores de vigilancia. Por un lado, se conocía que había un grupo de jóvenes dedicado a cometer robos con violencia y a amenazar a otros menores, a los que exigían dinero como tasa a abonar por utilizar simbología de su «banda» en redes sociales, amenazándoles con darles una paliza a ellos y a sus familiares, en caso de no pagar.

Violencia y amenazas

Por otro lado, los agentes investigaron lo ocurrido el pasado 4 de enero en el exterior de un restaurante de la Ronda de capuchinos, donde tres menores fueron requeridos por uno de los ahora detenidos junto a su grupo, para hablar con ellos.

Cuando las víctimas salieron del restaurante, fueron rodeadas por un grupo de jóvenes de entre 14 y 18 años, vestidos con ropas oscuras y pasamontañas, que les obligaron a dirigirse a una calle aledaña para, una vez allí, ponerlos de rodillas.

Ya en esta postura, los agresores les propinaron guantazos en la cara y les escupieron en repetidas ocasiones, mientras les preguntaban si pertenecían a una «banda rival», siendo además grabadas dichas agresiones y publicadas en redes sociales.

Las fuentes policiales señalan a los detenidos como miembros de un grupo violento de carácter juvenil conocido como ‘Crips’, el cual se caracteriza por el uso de vestimentas y pañuelos de color azul y cuyos miembros emplean violencia e intimidación grupal en la comisión de delitos (principalmente patrimoniales) y se orientan hacia la defensa de un territorio y de una simbología concreta frente a otros grupos.

Realizadas las gestiones oportunas de investigación, los agentes determinaron que el grupo se incardinaba en el contexto de los denominados «Grupos Violentos de Origen o Referencia Grupal Latino», referido a aquellos integrados por menores de edad, o conjuntamente por menores y jóvenes, entre 14 y 30 años, que pueden presentar estructuras de cohesión y disciplina interna y cuyas actuaciones suelen derivar en conductas de carácter violento que generan preocupación y alarma social.