Semana fatídica para Biden: A diez puntos detrás de Trump y con una desaprobación del 56%

La semana pasada fue un tiempo para olvidar para el presidente de EEUU, Joe Biden, por lo errores y meteduras de pata cometidos que captaron la atención de los medios de comunicación y el público en general. Dichos errores incluyeron chocar contra mástiles de banderas, dirigirse a personas por nombres equivocados y olvidarse de estrechar la mano a autoridades extranjeras.

Pero no solo eso, el índice de aprobación del presidente ha disminuido al 37%, cinco puntos porcentuales menos que en febrero. Según una encuesta reciente del Washington Post -un periódico cuya línea editorial está alineada con la administración demócrata- Biden está diez puntos por detrás de su posible rival republicano en las elecciones presidenciales de 2024, Donald Trump.

Las meteduras de pata han provocado que cada vez haya un sentir más generalizado en la sociedad estadounidense para que Biden abandone la carrera de las próximas elecciones, y no sólo desde sectores de la derecha del país sino también desde la izquierda del panorama político.

Muchos se preguntan aún cómo podrá enfrentarse a una larga campaña presidencial si continúa teniendo dificultades como las de la semana pasada y cómo se manejará cuatro años en el cargo si gana las elecciones.

Uno de los incidentes que llamaron mucho la atención la semana pasada ocurrió durante el discurso del presidente en la ONU junto al mandatario de Brasil, Lula da Silva. Biden se retiró sin estrecharle la mano a su colega brasileño, lo que pareció irritarle sobremanera.

«¿Puede oírme, presidente Biden? Este es un momento histórico para Brasil y para Estados Unidos», había afirmado Lula al inicio de su discurso.

Biden parecía confundido mientras toqueteaba los auriculares y Lula pronunciaba su discurso. En un momento dado, Biden dejó caer su auricular y arqueó las cejas con frustración.

Minutos después, el director general de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), Gilbert Houngbo, subió al estrado después de los dos líderes mundiales, y Biden se agachó para coger lentamente una carpeta del suelo. Houngbo quiso estrechar la mano de Biden y Lula, pero Biden dejó al brasileño a un lado, saludando torpemente a la audiencia antes de retirarse del escenario.

Unos días después, el 22 de septiembre, el presidente cometió otra metedura de pata pública cuando todas las miradas estaban puestas en él durante un discurso en Washington. Biden elogió erróneamente al ‘Caucus Negro del Congreso’ durante un discurso ante el Caucus Hispano. Y no sólo eso, el mandatario también afirmó (erróneamente) haber estado en «todos los tiroteos masivos» de la pasada semana.

«Después de cada tiroteo masivo, escuchamos un mensaje simple, el mismo mensaje se escucha en todo el país, y yo he estado en todos eellos», le dijo a su público.

Este año se han producido más de 500 tiroteos masivos en Estados Unidos y los críticos en las redes sociales fueron mordaces en su respuesta a la última gran historia del presidente estadounidense.

Un extraño comentario que llega después de que mintiera al decir  que había visitado la Zona Cero el día después del 11 de septiembre, y dejó a muchos preguntando si estaba mintiendo u olvidándolo.