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Uno de los pueblos más bonitos de España que parece sacado de Suiza y casi nadie conoce

  • Janire Manzanas
  • Graduada en Marketing y experta en Marketing Digital. Redactora en OK Diario. Experta en curiosidades, mascotas, consumo y Lotería de Navidad.

España es un destino turístico de primer nivel, ocupando el segundo lugar en el ranking mundial de visitantes en el año 2024, según la Organización Mundial del Turismo. Las playas y encantadores pueblos son reconocidos entre los mejores del mundo. Por ejemplo, el Valle de Arán, en el norte de Cataluña, se asemeja a un paraíso, albergando la mayor estación de esquí del país, Baqueira Beret, y una ruta que conecta sus siete pintorescos pueblos.

Este valle, situado en el corazón de los Pirineos, destaca por su singularidad como el único valle atlántico de la región. Sus impresionantes paisajes evocan la belleza suiza, mientras que su historia y conexión con Occitania han dado lugar a la lengua aranés, oficialmente reconocido. Los pueblos que componen el Valle de Arán, como Vielha y Bagergue, tienen un encanto esspecial. Vielha, la capital, se encuentra junto al río Garona y ofrece una amplia gama de servicios y actividades, mientras que Bagergue, el primer pueblo catalán en ser considerado uno de los más bonitos de España, destaca por su su singular belleza.

Vielha, el corazón del Valle de Arán

La historia de Vielha se remonta a la prehistoria, con pruebas de asentamientos humanos desde la Edad de Piedra, aunque fue en la época romana cuando comenzó a ser reconocida como un importante punto de conexión entre el valle y el resto de la península.

Durante la Edad Media, Vielha se convirtió en un centro administrativo y comercial clave. En 1065, se documenta la existencia de la iglesia de San Miguel, que se erigió como un símbolo de la comunidad. La cercanía al antiguo reino de Navarra y su relación con la cultura occitana aportaron diversas influencias que enriquecieron su patrimonio cultural.

En el siglo XIII, Vielha se unió a la Corona de Aragón, y la comarca del Valle de Arán pasó a formar parte de este dominio. En este período, se levantaron notables edificaciones, incluidas iglesias románicas que aún perduran como testigos del pasado. La economía local durante la Edad Media se sustentaba en la agricultura, la ganadería y el comercio.

El siglo XIX marcó el inicio de una transformación significativa con el auge del turismo, gracias a sus paisajes y clima. La inauguración de la estación de esquí de Baqueira Beret en 1964 convirtió a Vielha como un destino turístico principal en España. Hoy, combina historia, cultura y actividades al aire libre, atrayendo a visitantes que se fascinan por su rico patrimonio y su deliciosa gastronomía, como la olla aranesa.

Lugares de interés

Vielha, el corazón del Valle de Arán, ofrece un centro histórico cautivador que refleja la esencia de un auténtico pueblo pirenaico. Uno de los principales lugares de interés es la iglesia de San Miguel, que alberga el Cristo de Mijarán, símbolo de la localidad. También destaca el edificio del Ayuntamiento, que presenta una elegante estructura porticada.

Un lugar emblemático es la torre del General Martinhon, una mansión del siglo XVII que alberga la sede del museo del Valle. Este espacio permite conoce la vida cotidiana de épocas pasadas a través de objetos y fotografías antiguas de la región. Otro museo digno de mención es el museo de la Lana, donde se puede ver la tejedora Müller Jenny, que operaba con energía hidráulica del río Nere, esencial en los talleres de ropa durante la Revolución Industrial.

Además, la Casa Rodés, una vivienda renacentista recientemente restaurada, es un testimonio de la historia local, ya que fue el hogar de una de las familias más influyentes del siglo XVIII. Aunque Vielha es famosa por su turismo de nieve y su proximidad a Baqueira Beret, ofrece multitud de atractivos culturales que merece la pena descubrir.

Los mejores planes en el Valle de Arán

El Valle de Arán es un destino ideal que combina paisajes naturales extraordinarios con una rica herencia cultural. Tanto en invierno como en verano, ofrece una variedad de actividades que cautivan a todos los visitantes.

Uno de los principales atractivos es la estación de esquí de Baqueira Beret, considerada la mejor de España, con más de 160 kilómetros de pistas que se adaptan a esquiadores de todos los niveles. Durante la temporada de invierno, disfrutar de un día en las pistas y culminarlo con una cena en un restaurante local se convierte en una experiencia inolvidable.

Cuando llega el buen tiempo, el Valle se transforma en un paraíso para los senderistas, con numerosas rutas que permiten explorar la belleza de sus montañas y lagos. Destacan caminos como el que lleva a la Iglesia de Santa Eulalia y al Lago de Colomers, ideales para un día de picnic rodeado de naturaleza.

Finalmente, el Valle de Arán celebra diversas festividades a lo largo del año, como la Fiesta de Juan y la Feria de San Miguel, donde la música, danza y gastronomía local crean un ambiente festivo único.