Ventajas e inconvenientes de saltar a la comba
Uno de los ejercicios más simples y efectivos es el salto a la comba o cuerda. Basta con coger en cada una de las manos una cuerda de unos dos metros de longitud y saltar sobre ella al tiempo que da vueltas sobre nosotros. Se trata de una buena opción para mantenerse en forma y muchos deportistas ya le incluyen en sus entrenamientos. Aunque se trate de un ejercicio aeróbico puede convertirse en anaeróbico si realizamos cambios de ritmo bruscos. La cuerda puede ayudarnos a ejercitarnos en esos días en los que el clima no acompañe. A continuación te mostramos las ventajas e inconvenientes de saltar a la comba.
Ventajas
Se trata de un ejercicio bastante completo en donde se trabajan tanto la parte superior como la inferior del cuerpo. Se queman una gran cantidad de calorías al estar en constante movimiento los músculos. Si nos lo tomamos en serio y con una cierta constancia, conseguiremos perder los kilos que nos sobren.
Además, el trabajo que se hace con las cuerdas resulta muy interesante para favorecer la coordinación corporal. Aunque se trate de una actividad muy sencilla, hay que poner la mayor atención posible para hacerlo a la perfección. La persona que se pone a trabajar con la comba debe contar con un alto nivel de resistencia física, ya que de lo contrario en cuanto se hagan una docena de saltos ya no se podrá continuar. La gente que practicó este ejercicio de pequeño cuenta con una cierta ventaja, sobre todo porque contará con una mayor destreza.
Inconvenientes
Aunque se trate de una actividad muy positiva para aquellas personas que deseen adelgazar y mejorar su coordinación, también hay una serie de inconvenientes. El mayor es el gran impacto que soportan las articulaciones, sobre todo las rodillas. También sufre este problema la cadera, que podría acabar gravemente dañada, ya que no es capaz de soportar todo el peso del cuerpo. Sin embargo se podrían evitar estos daños sobre las rodillas y articulaciones si calzásemos unas zapatillas deportivas con amortiguación. De alguna manera nos protegerían contra el impacto que se provoca en los saltos, que suelen ser más agresivos sobre todo cuando se realiza en superficies duras como el asfalto. Lo ideal sería saltar sobre césped o tierra, en donde no hubiese una superficie demasiado irregular.
El último inconveniente que encontramos no lo es tanto para la mayoría, aunque sí que puede resultar un problema para aquellos que tengan como objetivo ganar músculo. Gracias a los saltos con cuerda conseguiremos tonificar los músculos que ya tenemos y que no crecerán. Al ser un ejercicio aeróbico el corazón llegará a un número determinado de pulsaciones y se mantendrá así hasta que finalice la actividad.
Saltar a la comba es muy recomendable porque resulta bastante completo y se puede practicar en cualquier lugar sin necesidad de realizar grandes desembolsos. Desde hace unos años ya se pueden adquirir en establecimientos deportivos con unos mangos ya incorporados para poner las cosas más fáciles a los que las utilizan.
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