La eficacia de las vacunas contra la «variante inglesa» de coronavirus

Mientras se pone en marcha el calendario de vacunación contra el SARS-CoV-2, la preocupación principal es si las vacunas serán eficaces contra lo que se ha dado en llamar “la variante inglesa” de COVID-19. Las mutaciones presentes en esta nueva variante, así como la que ha surgido en Sudáfrica, aún son recientes y, por ende, parcialmente estudiadas. Por lo tanto, los temores son legítimos, aunque la Agencia Europea de Medicamentos y las compañías que desarrollan las vacunas los consideran infundados.

Características de la variante inglesa de COVID-19

La variante inglesa de COVID-19, detectada por primera vez en el Reino Unido en octubre de 2020, se denomina SARS-CoV-2 VUI 202012/01. Estas son las siglas, en idioma inglés, de “variante en investigación, año 2020, mes 12, variante 01”.

Hay muchísimas variantes del SARS-CoV-2 (los últimos informes muestran unas 12.000), pero lo inusual de la variante inglesa es que tiene una gran cantidad de mutaciones. Y reemplaza rápidamente a otras variantes, es decir, se vuelve “dominante” y se expande peligrosamente rápido.

La nueva variante inglesa tiene 17 mutaciones genéticas que pueden afectar la proteína Spike del coronavirus. Los principales son dos:

• Mutación N501Y
• Deleción H69 / V70

La sospecha es que estas mutaciones, las que ya habían aparecido anteriormente, pueden hacer que el SARS-CoV-2 sea más contagioso y se extienda mucho más rápidamente. Los expertos mencionan que es difícil saberlo, pues para ello se necesita una nueva secuenciación y más investigaciones de laboratorio.

Sin embargo, la opinión unánime es que mientras se mantengan las medidas de prevención y se continúe con la vacunación, el riesgo de que el virus continúe propagándose y mutando se reduce de forma considerable.

Además, las vacunas disponibles actualmente han demostrado ser igualmente eficaces contra una gran variedad de mutaciones, por lo cual, teóricamente no debería ser diferente en este caso.

¿Son eficaces las vacunas contra la variante inglesa?

El lunes 21 de diciembre, la EMA (Agencia Europea del Medicamento) se expresó de forma muy positiva sobre la eficacia de la vacuna de Pfizer/BioNTech contra la variante inglesa. Así lo ha hecho también la compañía fabricante.

El fundador de BioNTech, el médico alemán de origen turco Uğur Şahin, uno de los desarrolladores de esta vacuna, ha dicho estar completamente seguro que la vacuna es eficaz contra la variante inglesa. En una entrevista, explicó que la respuesta inmune dada por la vacuna también compite con las nuevas variantes del virus. Su confianza radica en que las proteínas de la nueva variante son 99% iguales a los linajes del virus que ya son conocidos.

Además, las vacunas hacen que el sistema inmune rechace diferentes puntos de la proteína pico, y si las porciones individuales han mutado, esto “debería funcionar”. Las vacunas ofrecen una alta eficacia contra todas las mutaciones conocidas y, según los datos actuales, las pequeñas alteraciones en el genoma del virus no reducirían su eficacia.

Pfizer, Moderna y AstraZeneca prueban sus vacunas contra la variante inglesa

Más allá de las opiniones de Uğur Şahin, un equipo de investigadores se encuentra trabajando para determinar cuál es la eficacia de la vacuna Pfizer/BioNTech contra la nueva variante inglesa, de forma concluyente. El mismo escenario es idéntico en todas las compañías que desarrollan vacunas contra la COVID-19.

Moderna ha declarado que su vacuna ha demostrado ser eficaz ante las diversas mutaciones, pero la compañía está realizando pruebas para confirmar su eficacia ante la variante inglesa. En las próximas semanas, los resultados estarán listos y serán comunicados a la prensa.

Por su parte, el director ejecutivo y CEO de AstraZeneca, Pascal Soriot, dijo que, hasta el momento, creen que su vacuna, desarrollada junto con la Universidad de Oxford, seguiría siendo eficaz, pero que se están llevando a cabo los análisis pertinentes para demostrarlo.

Es conveniente recordar que la eficacia de la vacuna AstraZeneca en los ensayos preliminares fue del 70%, mientras que la de Pfizer y Moderna mostraron un 95/94% de eficacia, respectivamente. No obstante, Pascal Soriot anunció recientemente que AstraZeneca ofrecería un 100% de protección contra las formas graves de COVID-19.

Las vacunas se pueden adaptar rápidamente

En el peor de los casos, la vacuna podría actualizarse rápidamente si fuera necesario y el tiempo estimado es de 6 semanas. La tecnología de ARNm, a diferencia de la tradicional, es que acorta plazos, ya que no es necesario recurrir a otro virus preformado, sino que es el propio organismo que produce las proteínas.

Este es un sistema versátil que puede generar por ordenador nuevos segmentos de ARN, sintetizarlos y emplearlos para combatir a varios antígenos diferentes de forma muy eficaz. De hecho, esto es lo que sucede con todas las vacunas. La vacuna de la gripe se actualiza periódicamente con el fin de evitar que el virus acumule mutaciones que puedan resistir a los medicamentos.

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