Recetas de cocina
Un postre ligero cargado de vitaminas

Sorbete de mango sin azúcar

Sorbete de mango sin azúcar añadido, una receta ligera con textura casi de helado pero sin azúcar añadido. En otro artículo de Okdiario-recetas hicimos sorbete de menta. Hoy de mango y sin azúcar.

El mango fuente de vitamina A y C

El mango es una fruta de color anaranjado y sabor entre ácido y dulce. Es rica en vitamina A o retinol, una vitamina que necesitamos para mantener una correcta visión. También tiene 36 mg de vitamina C, uno de los antioxidantes más potentes. El mango no es muy calórico, solo 60 calorías por ración de 100 gramos y aporta 1.6 gramos de fibra.

Sorbete de mango sin azúcar

El consumo de mango es beneficioso para controlar la tensión arterial, ya que aportan potasio y magnesio. Los mangos han sido usado desde hace siglos en China y Tailandia como remedio para trastornos digestivos, sus enzimas contribuyen a una mejor digestión.

Los mangos contienen pectina, un tipo de fibra muy beneficiosa para controlar los niveles de colesterol en sangre. Por su alto contenido en retinol o vitamina A, los mangos son excelentes para la salud de los ojos. Aportan antioxidantes como la zeaxantina o la luteína. El betacaroteno ayuda a promover la salud de la piel y es un agente protector del sol y las reacciones fotoquímicas.

Sorbete de mango sin azúcar

Sorbete de mango sin azúcar

Ingredientes

Para decorar

Utensilios

Preparación

Sorbete de mango sin azúcar

Cortamos los mangos en cuadraditos, y los depositamos en la batidora (de vaso o en un recipiente si usas la batidora de mano). Añadimos el agua, el edulcorante en polvo, la ralladura de  naranja y el zumo de naranja.

 

Batir hasta lograr un puré suave, y verter este puré de mango en un recipiente y luego al congelador. Para lograr un sorbete sin máquina de helados tendremos que dejarlo cinco horas en el congelador. Cada hora sacamos el sorbete y lo rascamos con un tenedor, de esta manera evitamos que haga bloque de hielo. Pasadas ya tres o cuatro horas al rascar el hielo se nos irá quedando con una textura más suelta, propia del sorbete.