Opinión

¿Podrá Susana con Pedro Sánchez?

Dicen que Susana Díaz anunciará formalmente la presentación de su candidatura a las primarias del PSOE el próximo día 26 de marzo en un acto que tendrá lugar en Madrid. Hasta el momento, eso dicen. Motivo que ha sido ya suficiente como para ocupar la portada de periódicos tan relevantes como El País. Pero no hay más noticia que esa: gentes cercanas a Díaz anuncian que su anuncio tendrá lugar en breve. O sea, por el momento, nada nuevo bajo el sol. Porque hasta la fecha de hoy se han dicho muchas cosas. Como cuando se daba por seguro que anunciaría su candidatura inmediatamente después del día de Andalucía; también se ha publicado que lo haría el mismo día. Pero las páginas del calendario han sido arrancadas y de aquello, nada. La andaluza, que ha aprovechado las recientes fechas para inaugurar casas de Andalucía de aquí y de allá, no ha dicho una palabra al respecto.

Ya se empezaba a escuchar en los mentideros socialistas que Díaz, al final, no se presentaría. No eran pocos los que consideraban a Patxi López su mirlo blanco que, con el discurso de la unidad, representaría a la andaluza en diferido. Argumentaban distintas razones por las que Susana no daría el paso: el odio y la mala imagen que ha obtenido desde aquel bochornoso cónclave «golpista» —según hemos descrito algunos— del pasado uno de octubre. Además, desde entonces, el apoyo aparentemente masivo a Pedro Sánchez ha sido un clamor, haciendo calar el mensaje de que la militancia socialista, las bases, apoyaban al defenestrado ex secretario general. Y por si esto fuera poco, también había argumentos más estratégicos como el hecho de que Susana no se sienta en el Congreso de los Diputados de Madrid, por lo que esto resulta ya, de facto, una anomalía a lo que viene siendo el proceder del PSOE. Lo cierto es que, hasta ahora, todos los secretarios generales han estado sentados en el hemiciclo ocupando escaños de diputados nacionales. Además, este hecho se ha considerado siempre un posicionamiento fundamental para poder preparar al candidato a Presidencia de Gobierno por parte del PSOE. No en vano, ya apuntaba hace unos meses el dirigente socialista José María Barreda que la bicefalia podría ser una buena opción para el partido en estos momentos. ¿Qué quería decir José María con esto? Pues que sería interesante plantear la Secretaría General para una persona y la candidatura a la Presidencia de Gobierno a otra. Algo que yo, personalmente, siempre he defendido.

Sea como fuere, si tenemos en cuenta este último argumento, tanto Susana como Pedro estarían en las mismas. Aquélla porque directamente no concurrió a las elecciones como diputada nacional; éste porque dimitió y entregó su acta de diputado tras el comité federal del uno de octubre, donde le decapitaron. El único, por lo tanto, que seguiría cumpliendo con esa norma no escrita de estar al frente del PSOE mientras ocupa un escaño sería López. Y por el momento nadie se plantea que el vasco tenga el más mínimo atisbo de posibilidad de ganar las primarias. Dicen, también, que Susana va a dar el paso porque está agobiada con el movimiento que está generando Pedro Sánchez. Dicen que el pánico, incluso, le lleva a moverse y a dar el paso. Que cada día que pasa pierde los apoyos que tenía y por eso no quiere seguir demorando su presentación.

Personalmente creo que si el PSOE de verdad quisiera levantar cabeza, el resultado más positivo para salvarse pasaría por la victoria de Sánchez. Y, en su caso, la posterior proclamación de Díaz como candidata a la Presidencia de Gobierno. Y ojo, que esto lo digo atendiendo a las posibilidades que hay sobre la mesa. O las que va a haber en breve, según dicen. Me temo que toda esta «trifulca» terminará con un equipo integrador tras el Congreso: juntos remando en la misma dirección: Eduardo Madina —que ya está como responsable del documento político para el congreso— José Antonio Pérez Tapias —que ya se ha alistado en el ejército sanchista sin condiciones— y el propio Sánchez.  Quizás me equivoque pero creo contar con suficientes señales que apuntan hacia la»unidad», «el compañerismo» y «coser». El tiempo dirá si lo que dicen es cierto. Por el momento, de presentarse Susana a las primarias contra Sánchez mucho me temo que, o está preparado ese remate final del equipo unido que echa pelillos a la mar…. o al madrileño le van a dar por todos lados como la andaluza de verdad quiera hacerse con la Secretaría General. Porque todos sabemos que cuando algo se propone Susana —o más bien, quien apoya y respalda a la lideresa— no hay obstáculo que se interponga.