Opinión
PRIMERA LÍNEA

La indignidad de Armengol

Regresado del descanso estival, he oído por ahí que Francesc Antich tomó la decisión de aparcar su baja por enfermedad para garantizar a Francina Armengol ser la candidata a presidir el Govern en las elecciones del 2027. Dicho de manera coloquial, que todo está atado y bien atado para que nada ni nadie le haga sombra electoral a Lady Hat Bar o Barmengol, como se la conoce en Madrid. Vamos, que Xisco Antich le está guardando el sillón.

Aclaro que hablar de sombra electoral refiere las tripas del PSIB-PSOE, porque el 28-M de 2023 quedó claro que el electorado de Baleares decidió  darle una patada en el trasero a la Molt Honorable y tan sectaria inutilidad. Por si no bastase con la custodia de Antich, esta casa días atrás titulaba de tal manera el ascendente de Armengol sobre las bases socialistas: El PSIB tajante: «El liderazgo de Armengol es tan indiscutido como el de Sánchez».

Bueno es saberlo. Porque ello significa que nada ha cambiado en el partido de los socialistas de Baleares. Siguen tan sectarios como siempre, siendo la última muestra que Armengol acudiese a la Diada de Cataluña mientras le daba la espalda con absoluto desprecio a la Diada de Mallorca

El problema de los cuadros del PSIB-PSOE y de sus bases es creerse a pies juntillas que tratándose de la tercera autoridad del Estado eso le garantizará a Francina Armengol –piensan- regresar el 2027 al Consolat de Mar. ¡Están convencidos! Hay un pequeño detalle, sin embargo. En el año que lleva en la presidencia del Congreso de los Diputados ha dado sobradas muestras de su sectarismo sistemático, también de su escasa preparación para el cargo, y lo peor de todo, incluso lo más grave: ni tan siquiera es consciente de su sagrado papel como garante de la independencia del poder legislativo.

La prueba del algodón la tuvimos en el pasado comité federal del PSOE, al escuchar a su líder supremo o puto amo, Pedro Sánchez, decir esto: «Vamos a avanzar con determinación con o sin el apoyo de la oposición. Con o sin el concurso del poder legislativo». Es cierto que Sánchez titubeó en el final de la frase, probablemente consciente de la barbaridad que estaba diciendo, puesto que él es presidente del Gobierno de España porque le ha elegido el Congreso de los Diputados. De inmediato el periódico basura de la extrema izquierda, o sea eldiario.es, titulaba: «Los socios de investidura advierten a Sánchez de que no puede gobernar sin el Congreso». ¡Vaya, hasta la basura  de la extrema izquierda, por una vez, atendía a las reglas del juego!

¿Qué respuesta le dio Francina Armengol? ¡Absolutamente, nada de nada! Calló como lo que es: nadie; una vulgar correveidile, del sátrapa autócrata. Por completo incapaz de defender la independencia del Poder Legislativo, en definitiva de defender su dignidad democrática. Se calló porque el puto amo es verdad revelada en esta panda autodestructiva que el elector progre  adora y adora. ¿De verdad que ésta es la candidata que el electorado de las  Baleares puede tomarse en serio? Es pura basura institucional, tan incapaz de entender cuál es su papel áureo como tercera autoridad del Estado. 

Querido votante de derechas, ni se te ocurra quedarte en casa el año 2027. Porque Armengol es la maldad y la inutilidad personificadas.