COP30

España anuncia en la COP30 que aportará 35 millones de euros para los Fondos de Inversión Climática

España se convierte con esta aportación en el primer país en contribuir al programa ARISE junto con Alemania

Los Bancos Multilaterales de Desarrollo han presentado un informe que introduce métricas y metodologías para viabilizar la aplicación de recursos destinados a la naturaleza y la biodiversidad

  • Antonio Quilis
  • Periodista especializado en información medioambiental desde hace más de 20 años y ahora director de OKGREEN en OKDIARIO. Anteriormente director de El Mundo Ecológico. Colaborador en temas de medioambiente, ecología y sostenibilidad en Cadena Ser.

España aportará 35 millones de euros a los Fondos de Inversión Climática (CIF), según ha confirmado el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico. Del total, tres millones se destinarán al Programa de Naturaleza, Personas y Clima, al que España ya había contribuido, y 32 millones al nuevo programa ARISE (Acelerando Inversiones en Resiliencia e Innovaciones para Economías Sostenibles).

Este último instrumento, el programa ARISE, fue lanzado en octubre por los CIF y ha sido presentado durante el primer día de la COP30, que ya ha abierto sus puertas en Belém (Brasil) a 50.000 visitantes tras la Cumbre de Líderes que se desarrolló el jueves y el viernes pasados en la ciudad brasileña.

Primer país en contribuir

Según Transición Ecológica, España se convierte con esta aportación en el primer país en contribuir al programa ARISE junto con Alemania. En conjunto, ambos países contribuirán con más de 100 millones de dólares (86,4 millones de euros) que se utilizarán para poner en marcha el programa, movilizar los primeros planes de inversión y avanzar en su implementación.

Durante este lunes, los Bancos Multilaterales de Desarrollo (BMD) han presentado además un informe que introduce métricas y metodologías para viabilizar la aplicación de recursos destinados a la naturaleza y la biodiversidad.

De acuerdo con la organización brasileña de la Cumbre, el documento aborda las mejores prácticas para ampliar los resultados en la implementación de los recursos y analiza los obstáculos que deben superarse para lograr este objetivo.

Principales desafíos

Por otro lado, representantes de instituciones financieras y de gobiernos han debatido sobre este tema en el Evento de Alto Nivel sobre Adaptación con presidentes y vicepresidentes de Bancos Multilaterales y Fondos Climáticos.

Según detalla la organización brasileña, uno de los principales desafíos señalados en este acto ha sido el presupuesto limitado de la Asistencia Oficial al Desarrollo (AOD), financiamiento proporcionado por los gobiernos de países desarrollados a las naciones en desarrollo.

Durante su intervención, el presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Ilan Goldfajn, ha hecho un llamamiento a las instituciones financieras para que fomenten acciones de adaptación al cambio climático antes de que las poblaciones sufran aún más los impactos de los eventos extremos derivados de la crisis climática, como inundaciones y tornados.

Atención prioritaria para los países en desarrollo

Asimismo, el secretario general adjunto para la Acción Climática de la Organización de Naciones Unidas (ONU), Selwin Hart, ha advertido de que los países en desarrollo necesitan atención prioritaria de los bancos multilaterales y de los gobiernos para garantizar financiación climático con rapidez y escala, ya que estos territorios están experimentando los efectos del aumento de la temperatura por encima del promedio global.

«Lo que necesitamos ahora es aceleración y escala. Necesitamos el liderazgo de los bancos multilaterales más que nunca para implementar la Hoja de Ruta de Bakú a Belém», ha subrayado.

Objetivos para 2030

El documento presentado por los BMD, titulado De la innovación al impacto: Construyendo resiliencia para las personas y el Planeta, afirma que las instituciones están apoyando la meta de Glasgow de duplicar el financiamiento para la adaptación desde 2019, habiendo destinado más de 26.000 millones de dólares a países de ingresos bajos y medianos en 2024, con el objetivo de alcanzar los 42.000 millones en 2030.

En 2024, los BMD proporcionaron 137.000 millones para la financiación climática destinados a la adaptación y la mitigación, y movilizaron otros USD 134 mil millones en capital privado.

De esas cantidades, 85.000 millones y 33.000 millones, respectivamente, fueron destinados a economías de ingresos bajos y medianos. La meta de las instituciones es alcanzar USD 120 mil millones de sus propios recursos y USD 65 mil millones en capital privado movilizado para 2030.

Hay que derribar barreras

Los bancos señalan, sin embargo, que persisten barreras (como restricciones fiscales y carteras limitadas de proyectos) que dificultan el progreso de las inversiones en adaptación.

Como solución, los BMD recomiendan fortalecer la coordinación entre los distintos sectores gubernamentales, crear incentivos más claros para la participación del sector privado, optimizar el uso de recursos concesionales y transformar las estrategias climáticas en oportunidades bancables.