Naturaleza
Tierras raras

Terremoto en la industria minera: confirmado el hallazgo de tierras raras creciendo dentro de una planta viva

  • Manuel Morera
  • Periodista y fundador del pódcast V9, el programa de F1 más escuchado de España. Universidad de Valencia y Radio 3. Anteriormente en ElDesmarque, Levante TV y Las Provincias.

China nos ha acostumbrado a ser noticia por sus mega construcciones asiáticas, pero en esta ocasión lo que ha revolucionado a toda la industria minera es el extraño lugar donde han hallado tierras raras: dentro de una planta viva.

El descubrimiento se ha publicado en la revista Environmental Science & Technology, demuestra que un helecho puede cristalizar monacita a escala nanométrica dentro de sus tejidos, en condiciones normales de temperatura y presión, sin necesidad de procesos geológicos extremos.

Más allá de la anécdota, el estudio podría marcar un antes y un después en la extracción de recursos estratégicos para la energía, la tecnología y la defensa.

Hallan tierras raras creciendo en una planta viva de China

El mineral identificado es la monacita, un fosfato rico en elementos de tierras raras como cerio, lantano y neodimio. Hasta ahora, se asumía que sólo podía formarse bajo condiciones de alta presión y temperaturas de cientos de grados.

Pero lo más importante es que estos elementos son esenciales para la fabricación de turbinas eólicas, vehículos eléctricos, imanes permanentes y sistemas láser.

Sin embargo, la investigación prueba que el helecho perenne Blechnum orientale, una planta hiperacumuladora, puede absorber estos elementos del suelo y cristalizarlos de forma natural en sus tejidos extracelulares.

El equipo observó nanopartículas de tierras raras dentro de los haces vasculares y la epidermis de la planta, que posteriormente evolucionan hasta formar monacita a nanoescala.

Cómo han descubierto tierras raras en una planta de China

Los especímenes fueron recolectados en minas de tierras raras de Cantón, en el sur de China. La particularidad de este proceso es que ocurre a nivel del suelo y en condiciones ambientales normales.

Además, la monacita formada por la planta se diferencia de la monacita geológica convencional en un aspecto clave: es biológica, pura y no radiactiva, a diferencia de la mineral natural que suele ir acompañada de uranio y torio.

De hecho, este avance cambia lo que entendemos de la biomineralización vegetal. Hasta ahora se había subestimado la capacidad de las plantas para generar mineras complejos en su interior; este fenómeno se reservaba para animales y microbios.

Sin embargo, las plantas hiperacumuladoras son capaces de concentrar metales pesados y metaloides en sus tejidos hasta niveles cientos o miles de veces superiores a los del suelo. En el caso de Blechnum orientale, los elementos de tierras raras se concentran principalmente en sus hojas.

La planta asiática que puede transformar la fitominería

El descubrimiento tiene implicaciones directas en el desarrollo de la fitominería, una técnica que consiste en cultivar plantas hiperacumuladoras en suelos ricos en metales para extraerlos posteriormente desde la biomasa vegetal.

La implicación para el medioambiente es total. A diferencia de la minería tradicional, la fitominería propone un modelo de baja huella ecológica.

Es decir, este método permitiría recuperar tierras raras desde suelos contaminados, vertederos mineros o explotaciones abandonadas, con lo que combinaría la remediación ambiental con la obtención de recursos valiosos.

Otros países ya han avanzado en esa dirección. Existen proyectos piloto en lugares como Australia, Malasia y Filipinas centrados en otros metales estratégicos como el níquel o el cobalto.

Con la confirmación de que también es posible mineralizar tierras raras en plantas, se abre un nuevo frente para diversificar la producción global y reducir la dependencia de la minería intensiva.