Naturaleza
Insectos

No es una plaga, pero en Andalucía causa problemas y los apicultores se declaran «desesperados» ante su avance

  • Ana López Vera
  • Máster en Periodismo Deportivo. Pasé por medios como Diario AS y ABC de Sevilla. También colaboré con la Real Federación de Fútbol Andaluza.

La apicultura andaluza atraviesa momentos más difíciles. Un insecto invasor, de rápido crecimiento poblacional y gran voracidad, se ha convertido en el principal enemigo de las colmenas, arrasando la producción de miel y poniendo en jaque la estabilidad de cientos de explotaciones.

El sector, que ya sufría los efectos de la sequía y la caída de rentabilidad, se enfrenta ahora a una amenaza que compromete la biodiversidad y la seguridad en áreas rurales y urbanas.

El avispón oriental en Andalucía: una amenaza creciente para las abejas

El avispón oriental (Vespa orientalis) se ha detectado con fuerza en varias provincias andaluzas. Este insecto destaca por su color marrón rojizo y una franja amarilla en el abdomen que lo diferencia de la avispa asiática (Vespa velutina), presente sobre todo en el norte peninsular.

Su adaptación al clima mediterráneo lo convierte en un depredador especialmente difícil de frenar en la cuenca sur de España. Los primeros registros en la Península Ibérica datan de 2010 en Cádiz, probablemente introducido por el transporte marítimo o aéreo.

Desde entonces, su avance ha sido imparable, con focos importantes detectados a partir de 2018 y una expansión que ahora se extiende por Sevilla, Granada y, de forma alarmante, Jaén y Málaga.

Expansión del avispón oriental en estas provincias de Andalucía

En Málaga, el crecimiento de la especie ha sido explosivo. National Geographic señala que en 2024 el Ayuntamiento de la capital gestionó más de 400 avisos por nidos, frente a apenas 30 en 2023. Este incremento del 30% en un solo año muestra la capacidad de expansión del insecto.

Jaén se ha convertido en el otro gran epicentro. Los apicultores de la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) denuncian que este avispón está «diezmando» las colmenas y reconocen sentirse «desesperados».

La facilidad del insecto para instalarse en huecos de edificios, contenedores o muros urbanos multiplica el riesgo de encuentros con la población.

Medidas urgentes contra el avispón oriental

El impacto de este depredador se suma a otros problemas que ya tenía la apicultura: la crisis de rentabilidad, la sequía y la competencia desleal de la miel importada.

Frente a la pasividad de las administraciones, la COAG Andalucía ha iniciado contactos internacionales. Su responsable, Antonio Vázquez, viajó recientemente a Chipre, donde el avispón oriental es autóctono, con el objetivo de conocer métodos de control aplicables en España.

Mientras tanto, los apicultores denuncian pérdidas de hasta el 50% de sus colmenas y se ven obligados a costear trampas y otros sistemas de defensa por su cuenta.

Impacto del avispón oriental en la biodiversidad y la salud humana

El avispón oriental ataca directamente a las abejas para alimentar a sus larvas, debilitando las colmenas y comprometiendo la polinización de cultivos. Pero su dieta no se limita a estos insectos: también consume frutas como uvas, higos o mangos, lo que amplía el alcance de los daños económicos.

En zonas habitadas, su presencia supone un riesgo añadido. Sus picaduras son dolorosas y, en casos extremos, pueden resultar graves para la salud humana. Por ello, expertos y autoridades locales recomiendan no manipular nidos y dejar la retirada en manos de profesionales.