Tesla se enfrenta a un rival temible que ni ellos mismos esperaban

Que Tesla es una referencia en lo que a vehículos eléctricos se refiere lo sabe todo el mundo. Y por ello, es la más expuesta a los ataques de otros fabricantes. ¿Cómo derrocar al gigante? Como por separado es realmente complicado, lo mejor es unir fuerzas. Al menos es lo que han pensado cuatro de los grupos con más peso del panorama automovilístico actual: Volkswagen, con todas sus marcas, BMW, con Mini incluida, Daimler, con Mercedes y Smart, y Ford.

El objetivo de esta espectacular joint-venture no es otro que el de crear una red de puntos de recarga ultra-rápidos mejor que la que ofrece Tesla. Y ojo, porque esto no es moco de pavo, ya que el fabricante americano puede presumir hoy en día de poder dejar como nuevas las baterías de su Model S en poco más de 30 minutos.

Al parecer, esta alianza cuenta ya con la tecnología necesaria para desarrollar y producir cargadores con una potencia de hasta 350 kW. ¿Esto es mucho? Si tenemos en cuenta que los de Tesla se quedan en 120 kW y ya son de los punteros, sí.

De esta manera, este grupo de fabricantes se enfrenta a un segundo reto que parece más grande aún, que no es otro que el de repartir esta red de cargadores a partir de 2017 mismo. De hecho, los planes son que haya en nuestro continente hasta 400 el año que viene, cifra que irá aumentando hasta 2020.

Según se ha podido saber, la red de cargadores se basará en el sistema de recarga combinada CCS, que es compatible con la mayoría de coches eléctricos que hoy en día circulan por nuestras carreteras. Eso sí, según aseguran los creadores de estos puestos, el tiempo que empleemos en recargar las baterías será ahora similar al que utilizamos para llenar el depósito de combustible de nuestros vehículos de combustión. Si a esto le unimos que la autonomía de la que disponen los eléctricos va en aumento, puede que más pronto de lo que pensamos esta tecnología forme parte de la vida de todos nosotros.