Mascotas
Perros

Cómo evitar que los perros sufran con los petardos de San Juan

  • Janire Manzanas
  • Graduada en Marketing y experta en Marketing Digital. Redactora en OK Diario. Experta en curiosidades, mascotas, consumo y Lotería de Navidad.

Bien es sabido por todos que los perros son extremadamente sensibles a los ruidos fuertes, razón por la cual hay que tener especial cuidado con ellos durante la noche de San Juan, ya que los petardos pueden generarles miedo y ansiedad. Lo primero a tener en cuenta es que los animales experimentan el miedo de una forma muy parecida a como lo hacemos nosotros, así que es fácil imaginar su sufrimiento cuando oyen un petardo.

A esto hay que sumar el desconocimiento de no saber qué provoca ese ruido. Cuando los perros oyen un petardo no saben lo que pasa, así que simplemente lo perciben como una amenaza y esto les genera altos niveles de estrés. La falta de previsibilidad y de control de no saber cuándo va a aparecer el ruido de otro petardo ni de cuánto va a durar es el principal problema para lo canes, mucho más que la intensidad del propio ruido.

Síntomas más frecuentes

Identificar que los perros tienen miedo de los petardos en la noche de San Juan no es nada complicado. Aún así, es importante prestar mucha atención a sus comportamientos para ver cómo reacciona y actuar en consecuencia. Aunque cada animal es un mundo, hay algunos síntomas que son comunes en casi todos los casos: taquicardias, temblores, ansiedad, falta de aire, náuseas, desorientación y jadeo.

Los perros no tienen capacidad para racionalizar su ansiedad, de manera que la sufren de forma muy intensa. Por lo tanto, es esencial acompañarles en todo momento para aliviar en parte el miedo que sienten ante los petardos.

¿Qué hacer?

Como resulta lógico, la noche de San Juan los perros no deben quedarse solos en casa. Procura que esté en una habitación lo más alejada posible del ruido, a ser posible in ventanas. Si el animal tiene alguna zona segura en casa donde se siente a gusto, puede refugiarse ahí.

Mantén la calma y trata de transmitir esa misma sensación al perro pero con normalidad, sin exagerar. Lo canes son como una esponja con las emociones de sus tutores, así que si ve que estás nervioso, lo más probable es que él lo esté más.

Por supuesto, en ningún momento debe agobiarle ni estar encima suyo. Necesita su espacio, así que puedes estar en la misma habitación que él acompañándole, pero a cierta distancia. Debes dejar que sea él el que se acerque a ti cuando quiera.