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Cambio inaudito en los cementerios de Madrid: la norma que muchos estaban esperando

El Gobierno municipal de Madrid cambia el Reglamento de Prestación de Servicios Funerarios y Cementerios de la ciudad

Desde ahora los perros podrán entrar en los cementerios, aunque debidamente atados

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El Ayuntamiento de Madrid ha dado un paso importante con respecto a los cementerios de la capital al modificar su reglamento de prestación de servicios funerarios y cementerios. Una de las novedades más destacadas tiene que ver con la autorización para que los animales domésticos puedan acompañar a sus dueños durante las visitas a los cementerios, siempre y cuando estos vayan debidamente atados. Hasta hace poco, era del todo imposible que las mascotas entraran en los cementerios, pero todo ha cambiado a raíz de la nueva Ley de Bienestar Animal, que prohíbe dejar atadas a las mascotas fuera de cualquier establecimiento, incluyendo cementerios, bajo pena de multa, por lo que los propietarios podrán entrar ahora con sus perros en los cementerios.

De este modo, la Junta de Gobierno ha aprobado el proyecto inicial de modificación del Reglamento de Prestación de Servicios Funerarios y Cementerios en el que se recoge ese permiso para que los perros puedan entrar en los cementerios, algo que por otro lado está bien visto por la ciudadanía en general si tenemos en cuenta la consulta pública previa que se llevó a cabo para la redacción de este nuevo reglamento y en la que se reveló que una gran mayoría de los ciudadanos estaba a favor de permitir el acceso de animales domésticos a los cementerios. Se trata de una modificación que pretende facilitar la vida diaria de los dueños de mascotas, y al mismo tiempo, respetar las sensibilidades de aquellos que prefieren no estar en contacto con animales en espacios funerarios. Madrid sigue así los pasos de otras ciudades españolas, como Málaga, que ya han abordado este tipo de peticiones, evidenciando un cambio en la mentalidad sobre el papel de las mascotas en la sociedad actual.

Cambio en los cementerios de Madrid

La modificación del reglamento va más allá del simple acceso de los animales. También introduce otras novedades, como la ampliación de los derechos sobre las unidades de enterramiento, que ahora podrán ser adquiridas no sólo por confesiones religiosas, sino también por partidos políticos, asociaciones, fundaciones y otras entidades jurídicas sin ánimo de lucro. Este ajuste responde a la necesidad de simplificar y unificar todas las normativas relativas a los servicios funerarios bajo un único texto, tal como establece el Plan de Gobernanza y Simplificación Normativa del Ayuntamiento. Asimismo, el nuevo reglamento contempla la posibilidad de organizar visitas culturales a los cementerios, abriendo así la puerta a un uso más amplio y variado de estos espacios, que son también de interés histórico y patrimonial.

Entrada de mascotas en los cementerios de Madrid

Al margen de estos cambios, la novedad más destacada es esa inclusión de los animales domésticos en los cementerios ya que representa un cambio significativo en la forma en que se perciben estos espacios. Históricamente, los cementerios han sido lugares de recogimiento y silencio, donde la presencia de animales era vista como una posible fuente de interrupción o distracción. Sin embargo, esta percepción está evolucionando.  La normativa actual se alinea con la tendencia de integrar a las mascotas en más aspectos de la vida cotidiana, reconociendo el profundo vínculo emocional que muchas personas tienen con sus compañeros de cuatro patas. Este nuevo enfoque no solo mejora la experiencia de quienes visitan los cementerios, sino que también garantiza que la visita se realice en un entorno controlado y respetuoso.

Pero eso sí,  el Ayuntamiento ha subrayado la importancia de la responsabilidad de los dueños de mascotas. Los animales que ingresen a los cementerios deberán ir siempre bajo control, ya sea mediante una correa o un cordón, para evitar cualquier tipo de daño o alteración en el recinto. Los propietarios serán responsables de los posibles desperfectos que pudieran causar tanto a personas como a las instalaciones del cementerio. Este aspecto es crucial para garantizar que la convivencia entre animales y visitantes se desarrolle de forma armónica. El reglamento no sólo atiende a la comodidad de los dueños de mascotas, sino que también salvaguarda el respeto debido a estos espacios, de los que no debemos olvidar que tienen una carga emocional y simbólica significativa.

El resto de modificaciones relevantes

Además de la inclusión de los animales domésticos, la modificación del reglamento trae consigo otras medidas relevantes para la gestión de los cementerios antes avanzadas. Entre ellas destaca la posibilidad de organizar visitas culturales o de índole similar, lo que abre una nueva perspectiva sobre el uso de estos espacios. Los cementerios, más allá de ser lugares de reposo para los difuntos, son también espacios de interés histórico y patrimonial, que pueden ofrecer a la ciudadanía la oportunidad de conocer mejor su pasado. Estas visitas organizadas podrían convertirse en una forma novedosa de acercar a los madrileños a su historia local, generando un mayor sentido de comunidad y pertenencia.

En cuanto a las mencionadas unidades de enterramiento, la ampliación de los titulares posibles responde a una creciente demanda por parte de entidades jurídicas sin ánimo de lucro. Hasta ahora, sólo las confesiones religiosas podían adquirir estas unidades, lo que limitaba el acceso de otras organizaciones con fines no lucrativos. La modificación del reglamento permite ahora que partidos políticos, asociaciones y fundaciones puedan también disponer de ellas, lo que supone un avance en la democratización de estos espacios. De esta manera, se busca garantizar que los cementerios de Madrid sigan siendo accesibles y adecuados para todos los sectores de la sociedad.

El proyecto de modificación del reglamento, aprobado inicialmente por la Junta de Gobierno, deberá pasar ahora por un periodo de alegaciones durante 30 días naturales. Durante este tiempo, tanto ciudadanos como entidades interesadas podrán presentar sus propuestas y observaciones para mejorar el texto definitivo. Es previsible que, una vez superado este trámite, el nuevo reglamento entre en vigor sin grandes modificaciones, dado el amplio consenso social que ha generado la inclusión de los animales domésticos y el resto de novedades.